La metamorfosis de Val d’Aran, al cine
Un documental explica que Baqueira Beret se creó ahora hace medio siglo, pero la práctica del esquí comenzó mucho antes
El inicio de la temporada de esquí en Val d’Aran ha coincidido este fin de semana con el estreno en Salardú del documental Aguestes montanhes, istories de Baqueira, un documental etnográfico en el que se explica el impacto que la práctica del esquí y la creación del complejo invernal han tenido en la vida de los araneses y no sólo en su economía en los cincuenta años de su historia.
“Hemos tratado sobre todo de dar voz a los verdaderos protagonistas. Son más de sesenta testimonios que dan cuenta de cómo la explotación de una montaña puede transformar una sociedad rural, que experimenta una transformación: de la agricultura al turismo”. Así lo explica el director del documental, el cineasta Ivó Vinuesa, que ha convertido cien horas de grabación de entrevistas y visionado de numerosos audiovisuales en una película coral, la versión más “humana” del milagro económico aranés.
“Me ha interesado –explica el director– dar a conocer que el esquí en Val d’Aran se practica mucho antes de la creación de la estación. En la película se explica que el esquí era un medio de transporte y comunicación, de subsistencia, y que a partir de los años cuarenta la gente empieza a esquiar en las laderas cercanas a Salardú”.
Benito Ubeira, uno de los testimonios, vinculado a la estación desde sus inicios, explica que sus primeros esquís se los fabricaron entre él y su hermano Aquilino, con maderas procedentes de cajas de pescado. Según Vinuesa, la historia del esquí en Catalunya no se entendería sin las pistas de Baqueira. Los primeros esquiadores fueron socios del Centre Excursionista de Catalunya (CEC), que ya habían practicado este deporte en La Molina. El impresionante archivo fotográfico del CEC (Arxiufotografic.cec.cat) refleja fielmente estos hechos.
Baqueira Beret nació hace ahora cincuenta años por el impulso de tres empresarios, Jorge Jordana de Pozas, Jesús Serra Santamans y Luis Arias, que fue el primer director del complejo y murió en un accidente de helicóptero en 1970. Le sustituyó un sobrino, Miguel Arias, otro de los testimonios del documental, junto a Jesús Serra hijo. Según Ivó Vinuesa, el primer impulso de la estación también contó con muchos pequeños accionistas de los pueblos de Naut Aran. El documental explica la venta de los primeros terrenos para un aparcamiento, comprados a la familia Castellarnau. O las dificultades del ingeniero Roberto Cuñat para diseñar los primeros remontes hasta cotas cada vez más altas.
“Los testimonios van desgranando la presencia de la Familia Real, la llegada de esquiadores, los puestos de trabajo y la especulación urbanística, aspectos que explican la transformación de un paisaje”. Vinuesa sostiene que la explotación de la montaña ha supuesto muchos beneficios para los municipios araneses. “Los ayuntamientos finalmente consiguieron un canon por el que ingresan el 5% de la facturación bruta, un retorno que alimenta las cuentas municipales”.
Este es el sexto documental de Ivó Vinuesa, que practica “un cine que se preocupa por las personas, por la gente”. Aguestes montanhes ha contado con la producción de Manuel Rocher, del Pyrenmuseu de Naut Aran, vinculado al Ayuntamiento y donde también se narran los tiempos de los primeros exploradores y pioneros del Pirineo hasta el nacimiento del turismo.
Los pioneros del esquí fueron los socios del Centre Excursionista de Catalunya, como refleja su archivo fotográfico