Sueños truncados
Una decena de jugadores dieron el salto de la ACB a la NBA el pasado verano y apenas juegan
Henry Ford, el fundador de la marca de automóviles Ford, nació en una granja, en el seno de una familia pobre, en un pueblo rural al oeste de Detroit. Desde los 10 años sintió una incontrolable devoción por todo lo relacionado con el motor. Su sueño era dejar un legado imborrable. Y lo hizo. “Los que renuncian son muchos más que los que fracasan”, dijo en una entrevista al The New York Times a principios de los cuarenta, en sus últimos años de vida.
Con ese lema decidieron emprender el puente aéreo ACB– NBA hasta nueve jugadores este verano (desde el 2011, 27 jugadores han cruzado el charco directamente desde la Liga Endesa, lo que supone casi tantos como en los diez años anteriores: 29 desde el 2001 al 2010). Cuando la mayoría opta por el conservadurismo, los atrevidos dan un paso al frente y luchan por cumplir sus sueños. La insaciabilidad de los jóvenes no tiene límites. Sin embargo, salvo Kristaps Porzingis (ex Sevilla), a los demás les está costando mucho ser protagonistas en la mejor liga del mundo.
Y sorprende que esta falta de minutos la sufran jugadores procedentes del Barcelona, una de las mejores canteras de la NBA en los últimos años. Salvo Joe Ingles y Kostas Papanikolaou, en Utah y Denver, los demás exblaugrana no encuentran su hueco. El caso más sonado hasta ahora es el de Mario Hezonja, que tras ser número 5 del pasado draft apenas está contando para Scott Skiles, su entrenador en Orlando. Aunque en estas dos últimas semanas está entrando más en la rotación, su inconsistencia defensiva y la precipitación en ataque (1,2 pérdidas de media) le han dejado en el banquillo muchos minutos. En 24 partidos promedia 4,6 puntos, 1,5 rebotes y un 43,1% en tiros de campo en 13 minutos. “Estoy adaptado al vestuario y sé que poco a poco iré teniendo oportunidades. Aprendí la lección en Barcelona y mentalmente soy más fuerte”, asegura el croata. “Queremos consolidar sus hábitos y asegurarnos de que cuando entre en la pista sepa qué hacer y cómo jugar”, añade su técnico.
Otro ejemplo es Marcelinho Huertas. El brasileño optó por la experiencia estadounidense tras no renovar con el Barça. Convenció a los Lakers y a sus 32 años está en la franquicia más glamurosa de la NBA. Pero sus apariciones se pueden medir con cuentagotas. Poco más de 13 minutos por partido (si bien no ha jugado en la mitad de los 28 que llevan los angelinos) en los que destacan sus 3,2 asistencias de media.
Pero si a alguien le está yendo realmente mal es a Tibor Pleiss y DeShaun Thomas. El pívot alemán, tras un irregular curso en el conjunto barcelonista, decidió aceptar la llamada de Utah. Y sólo ha jugado cuatro partidos. “Trabaja muy bien, pero aún necesita ser más duro en la zona si quiere disfrutar de minutos”, apunta su técnico Quin Snyder. Estas últimas semanas ha estado jugando en la D-League (una especie de liga de desarrollo para los jóvenes utilizada como catapulta para la NBA), al igual que DeShaun Thomas, que no ha debutado todavía. El alero estadounidense no convenció a San Antonio Spurs e intenta demostrar en la D-League su potencial para conseguir un contrato.
Sólo Kristaps Porzingis es titular y destaca. El letón, número 4 del draft por delante de Hezonja, es el nuevo ídolo del Madison Square Garden. Sus camisetas se han agotado, la prestigiosa revista SLAM le ha dedicado la portada en su último número y hasta unos aficionados le han dedicado un rap. Nueva York está ilusionada con Porzingis, que promedia 13 puntos y 8 rebotes en 27 minutos y es serio candidato a ganar el premio a novato del año.
Las torres Salah Mejri (exMadrid) y Walter Tavares (exGran Canaria) apenas llegan a la decena de partidos, Marcus Landry fue cortado a mitad de curso (ha fichado recientemente por Gipuzkoa Basket) y Raulzinho Neto es titular en Utah gracias a la lesión de Dante Exum.
“Algunas personas quieren que algo ocurra, otras sueñan con que pasará, otras hacen que suceda”. Palabras de Michael Jordan. En ello están los jugadores de la ACB que decidieron dar el salto a la NBA este verano.
MARIO HEZONJA “Aprendí la lección en Barcelona y mentalmente soy más fuerte”, afirma el jugador croata MARCELINHO HUERTAS Sus apariciones con los Lakers se miden con cuentagotas y sólo destaca con las asistencias