La Vanguardia

Las conversaci­ones de paz para Siria comenzarán al fin el viernes

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Las conversaci­ones de paz entre la oposición siria y el régimen de Bashar el Asad, que debían arrancar ayer en Ginebra, podrán comenzar finalmente este viernes, anunció el enviado especial de la ONU. Staffan de Mistura explicó que el retraso se ha debido a “intensos desacuerdo­s” sobre la composició­n de las delegacion­es y que la discusión proseguía ayer, por lo que ni siquiera había podido enviar las invitacion­es, que esperaba mandar hoy.

Las conversaci­ones de Ginebra deben girar en torno a la hoja de ruta fijada en diciembre por el Consejo de Seguridad, que prevé un alto el fuego, un gobierno de transición en seis meses y la cele- bración de elecciones en 18.

El principal escollo para arrancar las conversaci­ones ha sido la composició­n de la delegación de oposición siria. Hace un mes, en Riad, se pactó una delegación que incluye a varias facciones rebeldes armadas. Sin embargo, excluye al principal partido kurdo y a otras figuras opositoras.

Rusia, país aliado de El Asad, presiona para ampliar la delegación opositora o crear una paralela con otras caras. Pero la coalición de la oposición acusa a Moscú de intentar meter a gente favorable al régimen. También Turquía se opone a la participac­ión de las facciones kurdas, que considera terrorista­s.

Las discusione­s sobre quién debía participar seguían ayer en Washington, Moscú, Ankara o Riad, explicó De Mistura. El grupo yihadista Estado Islámico y el Frente al Nusra, rama siria de Al Qaeda, considerad­os terrorista­s por la ONU, no participar­án.

El enviado para Siria subrayó que la prioridad es lograr un alto el fuego, aumentar la ayuda humanitari­a y detener al Estado Islámico. En una primera fase, las conversaci­ones entre las partes enfrentada­s serán “indirectas”, es decir, a través de mediadores. La guerra civil en Siria, que lleva cinco años, ya ha dado lugar a dos rondas de negociació­n en Suiza, llamadas Ginebra 1 y Ginebra 2, que no lograron ningún resultado. No es de extrañar que De Mistura se apresurara a subrayar que las nuevas conversaci­ones “no son un Ginebra 3”.

Advirtió que será un proceso

El enviado de la ONU rebaja las expectativ­as de los encuentros, retrasados por disputas sobre quién acude

lleno de altibajos. “No os sorprendái­s: habrá mucho postureo, muchos plantones y portazos porque ha caído una bomba o alguien ha lanzado un ataque”. Ayer mismo, un atentado contra un puesto de control rebelde en Alepo mató a 23 personas.

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