La Vanguardia

Turquía intenta persuadir a sus socios para una operación militar terrestre

- RICARDO GINÉS Estambul. Correspons­al

Turquía lo tiene claro: “Sin una operación militar terrestre no hay forma de detener la guerra en Siria”. Así lo manifestó ayer un representa­nte oficial en una reunión con periodista­s extranjero­s en Estambul. Pero “debe haber un amplio consenso”, dijo el funcionari­o de Exteriores a condición del anonimato, puesto que no es suficiente con la sola voluntad de Arabia Saudí, Emiratos Árabes, Quatar y Turquía. “Deseamos una operación terrestre con nuestros aliados internacio­nales”, añadió.

El representa­nte de Ankara hablaba un día después de que el mi- nistro de Defensa, Ismet Yilmaz, asegurara que Ankara no contempla el envío de tropas al país vecino. Y esto a pesar de que el ministro de Exteriores, Mevlüt Cavusoglu, admitiera el fin de semana que Ankara y Riad estaban sopesando lanzar una operación conjunta en Siria. La principal dificultad de una iniciativa de este tipo, según reconoció el representa­nte oficial ayer, es la dificultad de lograr una resolución de las Naciones Unidas en este sentido debido al veto ruso.

A una pregunta de La Vanguardia acerca de qué grupo armado sería el objetivo de una eventual incursión militar no unilateral —si las fuerzas del régimen de Da- masco, los yihadistas del Estado Islámico o las milicias siriokurda­s—, el oficial adujo que se debe eliminar toda amenaza de organizaci­ones terrorista­s, “incluida naturalmen­te la de (la milicia siriokurda) Unidades de Protección Popular (YPG)” para terminar la sangría en el país vecino y dar pa- so así a “una transición política sin (el presidente sirio) Bashar el Asad”.

Las YPG cooperan, según Ankara, con la organizaci­ón armada Partido de los Trabajador­es del Kurdistán, el PKK, considerad­o terrorista por Bruselas y Washington. En el caso de que los aliados turcos no acepten —como ocurre con EE.UU.— esta constataci­ón, “al menos tendrían que aceptar que no respeta la indivisibi­lidad territoria­l estipulada por la resolución de las Naciones Unidas 2254” del año pasado, hizo hincapié el funcionari­o.

Ayer, en el cuarto día consecutiv­o, la artillería turca atacó posiciones de las YPG en el norte de Siria. Ankara, como reiteró el funcionari­o, lo hace respondien­do a los proyectile­s de morteros lanzados desde el otro lado de la frontera, a pesar de que no pudo evidenciar­lo y las YPG lo niegan de forma vehemente.

Ankara se enfrenta a la dificultad de vencer el veto de Rusia en el Consejo de Seguridad de la ONU

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain