La expansión de FGC
La compañía pública cerró el 2015 con superávit de 15 millones
La compañía de ferrocarriles de la Generalitat catalana se ha propuesto mejorar sus cuentas mediante la dinamización de los servicios de mercancías y los trabajos fuera de Catalunya, dos partidas actualmente minoritarias en las cifras de FGC, que el año pasado facturó 110 millones de euros.
Más proyectos fuera de Catalunya y más mercancías. Estas son las dos apuestas de Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) para mejorar sus cuentas en los próximos años. El margen no está en la reducción del gasto, que ya se ha rebajado considerablemente a raíz de la aplicación de un plan de ahorro y será difícil que se recorte más porque el servicio se está ampliando –en el Vallès y en Lleida–. La clave está en el aumento de los ingresos. Y no por la vía de las tarifas, sino por los dos ámbitos antes citados, que a día de hoy generan una facturación modesta, inferior a 5 millones de euros.
“Somos una compañía pequeña y nuestra razón de ser es el transporte de viajeros, pero podemos crecer por estas otras dos vías y, si hay oportunidades, las vamos a aprovechar”, explicó ayer el presidente de FGC, Enric Ticó, durante la presentación de los resultados del 2015. La actividad exterior no llega al millón de euros de facturación, principalmente en trabajos de consultoría e ingeniería. Ticó explicó que la empresa está preparada para asumir otro tipo de trabajos, de control de obras de infraestructura ye incluso de operación de líneas. En los últimos años ha participado en proyectos, la mayoría mediante consorcios, de Francia, Bélgica, el Reino Unido, Holanda, Dinamarca, Suecia, Finlandia, Alemania, Austria, Reino Unido, Italia, Polonia, Grecia, Chipre, Bosnia, Turquía, Israel, Argentina, Perú y México, además de en varias ciudades españolas.
En cuanto a las mercancías, Ticó reconoció que hay cierta “atonía” debido a la limitación de las infraestructuras, algo que se espera mejorar con actuaciones como el nuevo acceso ferroviario al puerto de Barcelona, en el que FGC es parte activa. El transporte de sal y potasa de las minas del Bages de Iberpotash y de automóviles –piezas y vehículos– de Seat generó 4 millones de euros de ingresos y un resultado neto equilibrado. Ambos clientes planean aumentar su cuota ferroviaria frente al camión y aquí FGC ve una vía de crecimiento futura.
La otra área no subvencionada, la de turismo y montaña, genera beneficios gracias a los trenes turísticos (con los de Montserrat a la cabeza) ya que las estaciones de esquí (La Molina, Núria, Vallter 2000, Espot y Port Ainé), globalmente, dan pérdidas. Esta división aportó 19 millones de ingresos el año pasado.
FGC facturó el año pasado 110 millones (+3%). Las subvenciones a los servicios públicos, principalmente de la ATM, sumaron 54,2 millones. El ejercicio se saldó con un superávit sobre el presupuesto de 15,2 millones de los que 7 millones volverán a la ATM y 8 millones irán a inversiones propias. Las líneas metropolitanas ingresaron 72,8 millones (+1,6%). El número de viajeros ascendió a 79,7 millones (+3,2%). La tasa de cobertura –parte del coste del servicio cubierto con ingresos propios– fue del 90,52%.
El área de negocio de turismo y montaña, que no está subvencionada, logra beneficios gracias a los trenes turísticos