El ex alcalde que transforma ciudades
La empresa de Jordi Hereu vende experiencias de gestión a otras urbes
Jordi Hereu es el único alcalde de Barcelona que al finalizar su mandato optó por alejarse de la actividad pública. “Cerré una etapa de catorce años de trabajo en el Ayuntamiento y decidí hacerme autónomo en el año 2012, en plena crisis, porque así podía trabajar simultáneamente en más de un proyecto y en temas de mi interés”.
Una de sus principales iniciativas es Idencity, una consultoría estratégica de ciudades que nace cuando un amigo del ex alcalde decide presentarle a Javier Serra, quién acababa de regresar a Barcelona tras estudiar planeamiento urbano en la Universidad de Nueva York.
Idencity trabaja con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), a través del programa Iniciativa de Ciudades Emergentes y Sostenibles (ICES), “que parte de la base que las urbes latinoamericanas se han hecho demasiado grandes y han crecido con un gran déficit de servicios esenciales para una ciudad”, afirma Hereu, “por lo tanto, se trata de impulsar el crecimiento de poblaciones intermedias desde un proyecto estratégico de ciudad y evitar los errores de crecimientos desorbitados sin planificación de las grandes megápolis como Lima, Ciudad de México o Bogotá, entre otras”.
La empresa ha recibido el encargo de desarrollar los índices y programas de competitividad del ICES, algo que, para Hereu, es fundamental puesto que “muchas de estas ciudades la sostenibilidad ambiental, urbana y fiscal tiene que tener un buen soporte en la generación de prosperidad y puestos de trabajo formales y de más calidad”.
De ahí nacen proyectos como definir la estrategia de desarrollo competitivo de Santa Marta, en Colombia, una ciudad de me- dio millón de habitantes, con altos índices de pobreza, que está recibiendo un gran número de inmigrantes. Muy similar es el trabajo que se está desarrollando en Quetzaltenango (Guatemala), donde el objetivo es la generación de empleo. En Chalco (México), Idencity ha impulsado el Plan Ciudadano 2015-2025. “En esta ocasión, un alcalde a punto de abandonar el cargo decidió que el legado que dejaría a su ciudad sería un gran pacto que la impulsara hacia el futuro”, explica Hereu, quien añade: “La presentación del Pacto de Ciudad lo hicimos ante más de 400 personas en la plaza mayor, con todos los sectores sociales y económicos a los que era la primera vez que se les había pedido participar en la construcción de un futuro común”.
Otro de sus clientes es Barranquilla, en Colombia, que será la sede de los XXIII Juegos Centroamericanos y del Caribe del 2018. “El reto consistía en poner este acontecimiento al servicio de la ciudad, de construir un proyecto común que se convirtiera en el auténtico legado de los juegos”, dice Hereu. Para ello han contado con la colaboración de Enric Truñó y su equipo.
En España han recibido el encargo de transformar el modelo turístico de Sant Antoni de Portmany, “un caso paradigmático”, asegura el ex alcalde, “porque supone cambiar radicalmente la ciudad y crear nuevas formas de movilidad, recuperar el paisaje urbano, cambiar el centro histórico y sus actividades, y eso sólo es posible a partir de un diálogo que englobe a todos los sectores económicos, sociales, educativos y que sea capaz de generar el acuerdo unánime de todas las fuerzas políticas”.
Hoy, la empresa que lidera Hereu se ha fortalecido lo suficiente como para plantearse concurrir en concursos internacionales.