Alonso, el mejor de la clase media
Hungría volvió a ser un escenario talismán para Fernando Alonso. En el circuito donde se presentó al mundo con su primera victoria en la F-1, hace 13 años, en la pista donde había logrado su mejor resultado en su segunda era en McLaren (5.º el año pasado), el asturiano volvió a ser competitivo y a disfrutar. Lógico: Hungaroring, estrecho y revirado, es donde el motor Honda del McLaren menos sufre su inferioridad. “Este fin de semana es el mejor de todo el año. En Mónaco fui 5.º, pero tuve bastante suerte. En condiciones normales, ha sido el mejor fin de semana. Muy contento por ser el primero del resto”, admitía Alonso, el mejor de la clase media, superado sólo por Mercedes, Red Bull y Ferrari, que “están muy por encima de los demás; esa mini batalla que tenemos el resto de equipos ha salido bien”, decía, reconociendo el adelantamiento clave en la salida sobre Carlos Sainz (7.º). En la carrera rodó delante del Toro Rosso y el Williams de Bottas, pero no se pudo acercar a los Ferrari. El asturiano en Hungría se ha posicionado en un regular 7.º puesto –en los tres ensayos, en la calificación y en la carrera– gracias a una mejor fiabilidad de su McLaren, que no tuvo el de Button, con problemas hidráulicos. “Estamos en una progresión buena, venimos de menos a más durante todo el año”, se esperanza Alonso.