“Gobierno y Generalitat han alimentado la confrontación”
Inés Arrimadas, líder de Ciutadans
Inés Arrimadas, dirigente de Ciutadans y líder de la oposición en el Parlament, prepara estos días la cuestión de confianza a Puigdemont, cuando se cumple un año de las elecciones del 27-S, y analiza en La
Vanguardia la coyuntura política en Catalunya y el conjunto de España.
Para algunos el proceso independentista se desinfla; para otros, como el ministro Margallo, avanza “a toda máquina”... Puigdemont sostiene que la hoja de ruta de Junts pel Sí sigue hacia delante pero, en cambio, vemos como a diario hay rectificaciones, matices y discrepancias entre los dirigentes independentistas. Por una razón muy simple: saben que no cuentan con el apoyo de la mayoría social en Catalunya. Por eso vuelven a la casilla de salida con un referéndum que tras el 9-N y las elecciones “plebiscitarias” del 27-S dijeron que estaba superado.
Tiene una relación cordial con Puigdemont y ha destacado que es más dialogante que Mas, ¿cree que se plantea un referéndum unilateral o incluso la declaración de independencia para el 2017? Conducir a Catalunya a esos extremos sería antidemocrático e irresponsable. Yo creo que vamos a vivir otro año perdido por el monotema independentista hasta que se celebren otras elecciones.
¿Qué le dirá a Puigdemont en la cuestión de confianza?
Que sea consciente de que su plan no goza de la confianza de la mayoría social de los catalanes y tampoco de las instituciones europeas.
Sostiene que la cuestión catalana, el choque institucional entre el Gobierno y la Generalitat requiere una solución política y no tanto judicial... Defendemos el cumplimiento de la legalidad y las sentencias. Dicho esto, considero indispensable que haya cuanto antes un nuevo gobierno en España dispuesto a dialogar y buscar espacios de encuentro. Ahora mismo no hay nadie al otro lado para hacer política.
¿A qué se refiere cuando habla de “hacer política”?
Venir a Catalunya para sentarse a dialogar, rebatir aquellos argumentos falaces del independentismo, reconocer también sus reivindicaciones legítimas. Nosotros hemos recogido algunas de ellas –como la mejora de la financiación, el corredor del Mediterráneo o inversiones en cercanías– en nuestros pactos con PSOE y PP.
¿La parte sentimental que hay detrás del independentismo se soluciona mejorando la financiación? En la Diada salió este año mucha menos gente, pero aún así son muchas personas y hay que ser muy respetuosos. No podemos cerrar los ojos al hecho de que una parte de los catalanes ha desconectado ya sentimentalmente de España. El principal responsable es el gobierno de la Generalitat, que ha alimentado el discurso del victimismo y la confrontación con el “España nos roba”, pero también ha contribuido el Gobierno central al no querer ver lo que estaba pasando en Catalunya.
¿Qué propone C’s? Hay que romper tópicos (como que los andaluces roban a los catalanes o que en Catalunya tienes problemas por hablar en castellano) y recuperar los sentimientos fraternales, destacar aquello que nos une a los españoles, fomentando, por ejemplo, el conocimiento y el uso público de todas las lenguas de España.
El nacionalismo catalán les acusa de ir contra la inmersión lingüística y de intentar con el trilingüismo diluir el peso del catalán en las escuelas... Hemos defendido que los catalanohablantes y castellanohablantes tengan los mismos derechos en el uso de del idioma. Eso no es ni atacar ni menospreciar el catalán. Yo misma soy de Jerez y creo que puedo mantener una conversación en un correcto catalán. Aprender en la escuela catalán, castellano e inglés es mucho mejor que hacerlo en una sola lengua.
¿Cree que tarde o temprano los catalanes deberán votar la relación que quieren mantener con el conjunto de España? C’s defiende una reforma constitucional para adaptarla al siglo XXI y ese cambio deberá ser refrendado en las urnas por los catalanes. Quiero votar para tener más y mejores derechos, no para romper con España y salir de la Unión Europea.
En sectores de su partido hay cierto malestar, y así lo han expresado algunos de los fundadores de C’s y dirigentes de primera hora, con la estrategia de moderar su discurso para seducir a exvotantes de CDC... Lo que no vamos a hacer es renunciar a nuestra catalanidad. Nacimos en Catalunya, estamos muy orgullosos de ese origen y queremos defender los intereses de los catalanes... Ocupar el centro político siempre fue nuestra vocación.
¿Cree que en el actual clima político pueden convivir bajo unas mismas siglas personas que vienen de la resistencia al nacionalismo con exvotantes de CDC? La pluralidad es una de las características de los partidos de centro y nuestra vocación es transversal, como se ha visto con los pactos alcanzados con PSOE y PP.
Algunos ven en esos acuerdos un exceso de tacticismo... Es saber ceder sin violar nuestros principios. Nuestros votantes no quieren que España siga bloqueada, quieren que haya estabilidad y se impulsen cambios.
LA ESTRATEGIA DE JUNTS PEL SÍ “Puigdemont no goza del apoyo de la mayoría social, de ahí sus rectificaciones”
Pero no han servido, por ahora, para que haya gobiernos... Hemos conseguido construir un espacio común con más de 100 propuestas. PP y PSOE tienen que convencerse de que lo que hace falta es que dejen a un lado los vetos y poner en marcha el país. El espacio común de consenso está ya construido y sólo falta que los viejos partidos se dejen de egos personales.
¿La solución es, pues, que Rajoy y Sánchez salgan de escena? Cuando uno se convierte en un problema para su país y su partido debería reflexionar.
¿Si C’s no entra este fin de semana en los Parlamentos vasco y gallego sería un fracaso? Es difícil entrar en un parlamento por primera vez. No lo llamaría fracaso.
RAJOY Y SÁNCHEZ “Cuando uno se convierte en un problema para su país debería reflexionar”