La patronal del ocio nocturno será acusación del caso de la ‘flashmob’
La patronal catalana de locales de ocio nocturno y restauración, la Fecasarm, se personará como acusación popular en el caso de la flashmob de Platja d’Aro, que a principios de agosto provocó una estampida en sus calles y dejó once personas heridas por contusiones leves y ataques de ansiedad, además de daños y pérdidas en el sector por valor de 150.000 euros.
El juzgado de Sant Feliu de Guíxols ha aceptado la solicitud de la entidad para poder comparecer y estar presente en el proceso abierto contra las cinco monitoras del grupo de turistas alemanes impulsoras de la performance.
La asociación adelanta que de entrada impugnará la petición de archivo hecha por la abogada de las monitoras alemanas. “Hechos tan graves como los que se vivieron no pueden quedar impunes”, aseguran desde la Fecasarm. Su portavoz, Joaquim Boadas, considera que “son claramente constitutivos de un presunto delito de desórdenes públicos” y reclamará que se las juzgue por ello. Además, tanto a las monitoras como a la organizadora del viaje, la compañía Ruf Reisen, y a su aseguradora (Allianz) las hará responsables de los daños y pérdidas en los locales. “Nuestra tarea será solicitar la pena que les corresponda del Código Penal”, explicó Boadas. La entidad pedirá también a los restaurantes y
Fecasarm quiere que se juzgue a las monitoras por un presunto delito de desórdenes públicos
locales que, a través de ellos, se personen a la causa para reclamar indemnizaciones.
“La histeria hizo caer a personas de edad avanzada, que se lesionaron; se destrozó mobiliario y televisores, entre otros desperfectos. También provocó una huida de los clientes de los locales sin haber pagado. Tendrían que haber previsto lo que podían provocar. Estamos a nivel 4 de alerta”, recordó Boadas.