Crímenes de no ficción
‘Muerte en León’ narra el caso del asesinato de Isabel Carrasco, presidenta de la Diputación, ocurrido en el 2014
El interés por los casos criminales reales está en alza. Se trata de un género, conocido como true crime (crimen real), que ha llegado con fuerza a la televisión y que ha revitalizado un estilo que Truman Capote ya utilizó hace medio siglo cuando publicó A
sangre fría, a medio camino entre la novela y la investigación periodística. La serie American crime story (2016) recreó el juicio contra OJ Simpson, la estrella de fútbol americano acusado de asesinar a su exmujer y su pareja;
The jinx (2015) mostró la polémica vida del empresario Robert Durst, sospechoso durante mucho tiempo del triple asesinato de su familia; y Making a murderer (2015)siguiódurante años a Steven Avery, un ciudadano acusado de violación, secuestro y asesinato que logró demostrar su inocencia y salir de la cárcel, aunque volvió después acusado de otro delito. Muerte en León, que arranca hoy en Movistar Estrenos a las 20.45 horas, se suma a esa tendencia televisiva con la narración del mediático caso del asesinato de la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco, ocurrida en mayo del 2014.
El director británico afincado en Barcelona Justin Webster está al frente de este proyecto que él insiste en catalogar de “serie de no ficción” y no de “documental”, porque esta última palabra suele “confundir más que explicar en algunas ocasiones”. Webster es uno de los directores de este género más relevantes de los últimos años, con trabajos como FC Barcelona confidential, Gabo, la magia de lo real y, especialmente, Seré asesinado, un acreditado documental sobre los últimos días del abogado guatemalteco Rodrigo Rosenberg, que denunció su propio asesinato en un vídeo casero. “Con este trabajo vi las posibilidades de este género”, afirma tras explicar que Muerte en
León presenta un estilo narrativo muy parecido.
La elaboración de Muerte en León ha requerido un año y medio de trabajo para producir los cuatro capítulos de una hora de que consta la serie. “Este género permite pasar más tiempo y profundizar en el caso”, un aspecto fundamental porque, “cuando estás tanto tiempo investigando, cualquier detalle acaba teniendo un significado diferente”, afirma Webster citando a la periodista Sarah Koenig, creadora de Serial, un programa de referencia en el género de la investigación difundido en esta ocasión vía podcast.
En Muerte en León, además de la historia de Isabel Carrasco, también se recoge las de las acusadas Montserrat González, su hija Triana Martínez y Raquel Gago. También se recrea el crimen, el juicio y las circunstancias que rodearon el caso. Isabel Carrasco fue asesinada a plena luz del día en una pasarela sobre el río Bernesga, en el centro de León. Montserrat y Triana, madre e hija, fueron detenidas junto con Raquel, policía local y amiga de Triana. Las tres fueron juzgadas y condenadas, en grados diferentes, por ese asesinato. En la actualidad, la sentencia está pendiente en última instancia del Tribunal Supremo, que tiene una vista programada para el próximo 14 de diciembre.
Luchas de poder, corrupción política, nepotismo, clientelismo, engaños policiales, servidumbres judiciales... Esta no es sólo la crónica de un crimen. “Normalmente, un asesinato suele ser el principio de una historia más grande y mucho más interesante”, señala el director, quien asegura que impulsó este proyecto con el deseo de “intentar entender qué había pasado, porque desde la distancia era bastante difícil de comprender”.
Para el director, narrar historias reales y mantener el interés del espectador no son aspectos contradictorios. “Aunque son dos lenguajes diferentes, la narrativa de la no ficción toma elementos de la ficción para poder contar una buena historia de forma amena. No se prescinde del rigor periodístico ni se distorsiona la realidad para hacer más atractiva la narración. Lo que si se necesita es mucho material de base para poder elaborar esa historia sin necesidad de crear nada ficticio”.
¿A qué conclusión llegarán los espectadores tras ver Muerte en León? “Van a saber mucho más y, sobre todo, van a tener las herramientas para llegar a una opinión mucho más formada”. En el programa se realizan “muchas revelaciones porque hay mucha participación de todas las partes que aportan sus versiones y puntos de vista diferentes sobre la misma historia”, afirma.
Sobre si han encontrado facilidades para elaborar la serie, Webster asegura: “Primero tuvimos obstáculos, pero luego facilidades. Tiene que ver con el tiempo. Hay que explicar bien lo que estamos haciendo para ganar la confianza de la gente, cosa que hemos hecho con todas las partes, desde el juez hasta las acusadas y sus amigos”. Sólo hubo una excepción, Raquel, la policía amiga de Triana, que no quiso atenderles. El caso esta aún abierto y “todavía puede haber sorpresas, como en cualquier proceso judicial, así que no descarto hacer algún retoque si se producen novedades importantes antes de la emisión de todos los capítulos”, afirma Webster.
El director Justin Webster asegura que “un asesinato suele ser el principio de una historia mucho más interesante”