La batalla interna en Podemos se recrudece en público
Errejón planta cara tras pisar los talones a Iglesias en la última votación Ambos bandos se enzarzan por la destitución de un cargo errejonista
El sector de Íñigo Errejón no parece dispuesto a acatar así como así las decisiones de Pablo Iglesias en puertas de la asamblea de Podemos de febrero, sobre todo tras perder por menos de lo previsto la votación sobre el modelo de congreso. Los errejonistas han plantado cara a raíz del cese del portavoz en la Asamblea de Madrid.
Los planes de Pablo Iglesias de convocar una consulta previa a su congreso de febrero (Vistalegre 2) para zanjar las tensiones internas ha resultado lo contrario de lo que pretendía. Pese al triunfo de la propuesta del secretario general y el secretario de organización, Pablo Echenique, llamada Desborda, el buen resultado de los seguidores de Íñigo Errejón, aglutinados bajo el lema “Recuperar la ilusión”, los ha convertido en una corriente alternativa a la línea de Iglesias.
No hubo que esperar mucho para probar la negativa de los seguidores de Errejón a plegarse a la consigna de disolverse dentro de Podemos de cara a la asamblea estatal que debe refundar la formación. Apenas diez horas después de que Iglesias proclamara su intención de integrar a las distintas sensibilidades tanto si van en listas conjuntas como si concurren de forma separada, los principales rostros del errejonismo reaccionaban como un solo hombre contra la sustitución de la portavocía de José Manuel López en la Asamblea de Madrid.
El cese de López, errejonista declarado, había sido anunciado en septiembre, antes incluso de las primarias de Podemos en la Comunidad de Madrid, en las que el candidato apoyado por Iglesias, Ramón Espinar, derrotó a la errejonista Rita Maestre y se hizo con el control del aparato madrileño de la formación. Madrid era un feudo ansiado por los seguidores de Íñigo Errejón, de forma singular por Maestre, pero el triunfo de Espinar frustró sus planes.
Aun así, la consulta de la semana pasada, en la que los partidarios de Errejón fueron derrotados por sólo dos puntos, con una participación muy alta, sirvió para reforzarlos, por lo que se sintieron legitimados para protestar contra la decisión del consejo ciudadano autonómico, que el viernes reemplazaba a López. La protesta errejonista en las redes contó esta vez con un elemento añadido poco habitual: el propio Íñigo Errejón, de común prudente en sus pronunciamientos internos, apoyaba la revuelta explícitamente y criticaba al consejo ciudadano madrileño por la decisión adoptada. La respuesta del sector afín a Iglesias no se hizo esperar, y lanzaban un hastag, #AsínoÍñigo, para exigir que se respetaran las decisiones de los órganos internos, y de paso desprestigiar al portavoz de Unidos Podemos en el Congreso.
A esta iniciativa se unía Echenique, con una llamada a la calma a la que Rita Maestre respondía con una peineta en forma de meme en las redes sociales. Echenique pedía que se respetase la autonomía de decisión de los órganos internos, y que no se empleasen términos como “purga” para calificar cualquier sustitución legítima. También proponía evitar el modelo de familias y baronías internas de los partidos convencionales. La reacción de Maestre contra Echenique vino a
Esta vez la pelea surge de la sustitución del portavoz de la Asamblea de Madrid, José Manuel López
Los errejonistas se enfrentan en público al secretario de organización, Pablo Echenique
demostrar que el errejonismo se siente hoy tan consolidado como corriente interna como para desairar en público al secretario de organización y actuar por su cuenta.
En medio de este jaleo, Iglesias ha permanecido en silencio. El panorama es extremadamente enrevesado para él, e incluso parece improbable que la batalla se cierre en Vistalegre 2. La negativa de Errejón a disputar la secretaría general a Iglesias es un caramelo envenenado. Por una parte, obliga a Iglesias a ser candidato de todas las corrientes y limita su capacidad para apostar por su propio modelo de organización y estrategia política. Por otra, al no presentarse a la disputa, impide que el errejonismo, que ha perdido todos los procesos internos de Podemos en el último otoño, pueda salir derrotado en el Congreso y que la batalla quede resuelta.
Iglesias, como indicó la votación de la pasada semana, cuenta con fuerza suficiente para ganar el Congreso, toda vez que sus partidarios han vencido en todos los procesos territoriales a los de Errejón, y que además puede disponer del apoyo de los anticapitalistas de Miguel Urbán, con los que mantiene excelentes relaciones y que, en cualquier caso están muy alejados del llamado posibilismo del número dos de Podemos. Sin embargo, Errejón, además de la probada consolidación interna, goza de grandes apoyos fuera de Podemos, que se girarían en contra de Iglesias en caso de que el secretario político fuese derrotado en Vistalegre 2.