Año nuevo, vida nueva
El Espanyol recibe al Deportivo para tratar de renacer tras la eliminación copera
Ante la visita al Deportivo en los últimos coletazos de la primera vuelta liguera, Quique Sánchez Flores asegura que la goleada del Camp Nou está olvidada y que la eliminación en la Copa ante un Segunda, el Alcorcón, también debe quedar como una anécdota más en el nuevo proyecto del Espanyol.
“Una de mis prioridades es que sepamos demostrar que ante la adversidad nos levantamos y seguimos adelante. Cometimos un error en la Copa dejando que un equipo inferior nos igualase, estamos avisados y sabemos que si no damos el 100% no somos especiales. En el Camp Nou las cosas fueron diferentes, hemos analizado mucho ese partido y hay cosas que nos sirven para crecer. Ahora se trata de volver a demostrar a nuestra afición que lo damos todo. Queremos seguir creciendo, porque estamos lejos de lo que queremos y tenemos mucho camino por recorrer. Es difícil ser competitivos y definir un modelo y un estilo, como tratamos de hacer. Tenemos humildad para reconocer que no somos los mejores y tenemos que trabajar”.
Quique Sánchez Flores ofreció ayer un amplio discurso para exponer a modo de declaración de intenciones que lo pasado, pasado está. Que la goleada del Camp Nou está olvidada y que la eliminación en la Copa ante un Segunda también debe quedar como una anécdota más en el nuevo proyecto blanquiazul. Es hora de pensar en la visita de esta noche del Deportivo, en los últimos coletazos de una primera vuelta liguera con un calendario que puede ser propicio y en esa segunda vuelta de la competición que debe confirmar la nueva línea del equipo tras el tropiezo prenavideño.
“Nuestra filosofía es difícil de cambiar, lo que cuenta es el día a día y el resultado es primordial, empezando por el que consigamos ante el Deportivo. No quiero cambiar nuestra cultura. Seguimos siendo los mismos ante la adversidad y ante las cosas positivas”, prosiguió el técnico con su discurso. Quique sabe que, con estos precedentes, la visita del Deportivo no es un partido al uso. Un mal resultado podría pesar demasiado, sobre todo si viene unido a un mal partido de los suyos. De ahí que estos días sus esfuerzos se hayan centrado en combatir contra cualquier tipo de conformismo o relajación.
Tampoco es un partido para experimentos, como los que realizó frente al Alcorcón en la vuelta de la Copa. De ahí que el retorno de Víctor Sánchez a la convocatoria para cubrir el lateral derecho sea la mejor noticia con que el técnico se presentó ayer en la sala de prensa de Sant Adrià, siempre que el factótum de la plantilla esté realmente para jugar los 90 minutos. Esa es, al menos, la intención del jugador. En la lista también están el filial Marc Navarro, alternativa de Víctor en el lateral diestro, ya que Javi López se quedó fuera por una lesión que arrastra desde antes de Navidad.
También se quedaron fuera por decisión técnica Álvaro Vázquez –el míster aseguró que no se trataba de un castigo– y Diego López, no recuperado de la brecha que sufrió en el Camp Nou. De ahí que Roberto tenga un nuevo examen, por más que Sánchez Flores tratase ayer de quitarle presión. “No es reválida ni oportunidad. No es justo, tiene una gran carrera, se merece un respeto y este partido no es una final, sino uno más en su carrera”, afirmó.
LA SITUACIÓN DE LA PORTERÍA “No es una reválida, tiene una gran carrera y será un partido más para Roberto”, dice Sánchez Flores