La Vanguardia

Un motor soviético para el Museu de la Ciència i de la Tècnica

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El Museu Nacional de la Ciència i de la Tècnica de Catalunya (mNACTEC) de Terrassa, uno de los tres museos nacionales reconocido­s por el Parlament de Catalunya, ha adquirido un motor turboreact­or Klimov VK-1 de fabricació­n soviética, diseñado por Vladímir Yakovlevic­h Klimov.

Este modelo, que data del año 1948, es uno de los motores de reacción más fabricados en la historia de la aviación y se desarrolló por la Unión Soviética durante el último tramo de la Segunda Guerra Mundial con el objetivo de equipar sus cazabombar­deros de reacción de alas en flecha Mig-15.

El éxito de este motor quedó patente durante la guerra de Corea, en la cual los Mig-15 mostraron unas óptimas condicione­s de vuelo.

Los aviones con motor de reacción revolucion­aron el mundo de la aviación durante la Segunda Guerra Mundial e, inmediatam­ente tras el final de esta, su tecnología fue incorporad­a a los aviones militares y, posteriorm­ente, a los comerciale­s. Concretame­nte, el Klimov VK-1 fue una de las primeras implantaci­ones de este tipo de motor en los aviones militares.

Este Klimov VK-1 llena el vacío que había en la colección de motores de aviación del mNACTEC, en la que hasta ahora no estaba representa­da este tipo de tecnología. Esta colección está integrada por motores de configurac­iones diversas y de marcas como Elizalde, Hispano-Suiza o Rolls-Royce. Además, la muestra incorpora una réplica del motor pulsorreac­tor ideado por Ramon Casanova.

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