La era Obama finaliza con la subida de salarios más alta en siete años
El último informe laboral deja un tibio incremento de empleo y el paro en el 4,7%
El desastre económico que tanto ha pregonado Donald Trump no parece reflejarse en las cifras oficiales. A pesar de esa retórica, capaz de darle la vuelta a cualquier argumento, el presidente Barack Obama le entrega un legado bastante más saneado que el que él recibió en el 2009, en plena recesión y al borde del colapso. Entre el 2010 y el 2016 se han creado 15,8 millones de empleos.
El último informe laboral de la era Obama aporta la cifra de 156.000 nuevos puestos de trabajo en diciembre, una nota tibia, por ser algo más baja respecto a las previsiones de los expertos.
El paro subió una décima, al 4,7%, pero el gran dato, según los analistas, es que los salarios se incrementaron una media de diez céntimos a la hora, cuando en noviembre habían bajado dos.
La caída y el estancamiento de los sueldos ha sido la asignatura pendiente de esta recuperación, al menos hasta hace poco. La media salarial ascendió un 0,4% en diciembre. Esto permite cerrar el 2016 con un incremento en doce meses del 2,9%, el mejor registro desde mediados del 2009.
Este aumento se percibe como una señal de que el bajo nivel de paro fuerza a los empresarios a ofrecer mejores pagas para atraer trabajadores y mantenerlos.
Si bien el índice de paro sube respecto a noviembre –el 4,6% fue un récord en nueve años–, la lectura ofrece un aspecto positivo. En realidad, más gente salió a buscar empleo. Sin embargo, este sigue siendo el caballo de batalla del presidente electo. Si en el recuento se incluyen los trabajadores a tiempo parcial dispuestos a trabajar a tiempo completo y los que ni siquiera buscan empleo, el índice asciende al 9,2%. Esta circunstancia explica el descontento aún palpable en muchos ciudadanos, frustrados por cómo ha sido la recuperación. Una sensación que se concentra en el “cinturón del óxido” (en el Medio Este), territorio trumpista, donde norteamericanos sin estudios o especialización se han quedado al margen al ver desaparecer empleo en la manufactura.
Sin embargo, este último informe muestra la fortaleza de sectores como la sanidad, la educación, las finanzas, los negocios y los servicios profesionales. Todos tuvieron un comportamiento fuerte al cierre del curso.
Trump toma el mando en un mo- mento en que el sentimiento de los consumidores, los beneficios de las corporaciones y la bolsa evolucionan al alza.
El 4,7% de paro es una cifra baja pese al incremento –hace cuatro años estaba al 8%. Obama recibió un índice del 7,8% en el 2009 y luego
UN LEGADO FUERTE La herencia que recibe Trump es mucho mejor que la que tuvo Obama