Cuatro muertos en un atentado con camión en Israel
Un atacante yihadista arrolla a un grupo de soldados en una zona turística de Jerusalén
El modelo de atentado registrado en julio en Niza y en diciembre en Berlín –un camión que arrolla a la multitud– se repitió ayer en Jerusalén. Esta vez murieron cuatro soldados, tres de ellos mujeres, y resultaron heridos otros diecisiete. El conductor del vehículo fue abatido al volante. El primer ministro Netanyahu lo identificó como un palestino yihadista.
Cuatro soldados israelíes, entre ellos tres chicas que llevaban muy poco tiempo cumpliendo el servicio militar, murieron ayer al ser atropellados por un camión en un atentado terrorista en el que otros 17 soldados resultaron heridos, algunos de ellos de gravedad, al quedar atrapados bajo el vehículo. El primer ministro israelí, Beniamin Netanyahu, que visitó el escenario de uno de los ataques más graves de los últimos años, declaró, tras recibir un informe del Shin Bet (servicio secreto): “El terrorista era palestino seguidor del Estado Islámico. Estamos aquí tras un atentado terrorista cruel y trágico, en que han sido asesinados cuatro soldados del Tsahal. Hemos sitiado el barrio de Yabel Mukaber y llevamos a cabo otras acciones que no puedo detallar. Acabo de reunirme con el ministro de Defensa, el jefe del Estado Mayor, el jefe del Shin Bet y otros para determinar las acciones que hay que seguir”. El líder israelí insinuó también la existencia de un vínculo entre el atentado de ayer y las recientes acciones de Berlín y Niza.
A las 13.15 horas, hora local, varios autobuses llegaron al paseo turístico de Armon Hanetziv, lugar al que acuden muchos turistas por sus buenas vistas de la ciudad vieja de Jerusalén. Muy cerca está situado el barrio palestino de Yabel Mukaber, que es parte de Jerusalén, por lo que todo ciudadano palestino que reside en el lugar tiene matrícula y documento de identidad israelí. Fady el Kanbar, padre de familia de 28 años y expreso de seguridad de la cárcel israelí, aprovechó esta circunstancia y se abalanzó con su camión Mercedes sobre un grupo de soldados que recibían un curso de oficiales en tareas administrativas y participaban en un día de visitas turísticas y conferencias en la ciudad santa.
Ayer mismo, fuerzas de seguridad israelíes arrestaron a nueve personas, entre ellas cinco familiares de El Kanbar. Su hermana dijo que “Dios lo eligió; gracias a él murió como un mártir”. Según el Shin Bet, el terrorista se radicalizó, empezó a vestirse como un salafista, y representa una nueva generación palestina que se identifica con el EI, que según la agencia secreta israelí tiene cada vez más apoyo entre la juventud. El gabinete de seguridad decidió arrestar sin juicio (detención administrativa) a todo aquel que exprese su apoyo al grupo yihadista, demoler la casa de la familia del terrorista, y no entregarles su cuerpo.
Los militares no abrieron fuego de inmediato, y aparentemente lo hicieron solamente cuando entendieron que se trataba de un ataque terrorista al ver que el palesti- no intentaba dar marcha atrás y atropellar a los heridos. El inspector jefe de la policía, Roni Alsheij, declaró en el lugar de los hechos que “sólo hacen falta dos segundos de oportunidad para atacar”. Cuando entendieron que era un atentado, los soldados dispararon ráfagas de ametralladora sobre el agresor, que resultó muerto en el acto. Ayer se despertó una gran polémica y el ejército ordenó una investigación, ya que quien abrió fuego primero fue un guía turístico llamado Eitan Rond, que tiene permiso para llevar una pistola. En cambio, los soldados esperaron a que su oficial les diese permiso para disparar, perdiendo valiosos segundos que permitieron al conductor seguir atropellando soldados.
“Siento mucho no haber pillado uno de los fusiles de los soldados para abrir fuego sobre el terrorista, porque mi pistola no fue efectiva. Me duele pensar que si hubiéramos reaccionado dos segundos antes, algunos de los jóvenes muertos aún estarían con nosotros”, declaró Rond. A su vez, el guía despertó un debate en todo el país al declarar que, en su opinión, los soldados temieron abrir fuego a raíz de la condena por homicidio emitida la semana pasada contra el joven soldado Elor Azaria, que mató a un palestino que yacía en el suelo tras haber atacado a soldados israelíes en Hebrón. Los cadetes que acaban de entrar en el servicio militar hace dos semanas y media oyen ahora que para abrir
Los militares esperaron órdenes para disparar; el primero en hacerlo fue un guía turístico
fuego han de tener “cuidado, cuidado, cuidado”. No obstante, el portavoz del ejército comunicó que no hay relación entre este caso y el del soldado encausado por el tiro mortal en Hebrón.
Según una testigo citada por el rotativo Yediot Aharonot, un grupo de palestinos que pasó por el lugar tras el atentado reaccionó con aplausos. En la franja de Gaza, el grupo islamista Hamas distribuyó caramelos felicitándose por el ataque, que fue definido en sus páginas web como “el atentado del camión de la intifada”. En un comunicado, Hamas declaró: “La intifada de Al Quds (Jerusalén en árabe) no es un hecho transitorio. Todos los intentos de reprimirla fracasarán”. Los islamistas que gobiernan Gaza intentan crear un efecto dominó que produzca más atentados de este tipo. El inspector de policía Al Sheij explicó que la incitación a la violencia en las redes sociales es la principal causa de los atentados terroristas de los llamados lobos solitarios.
Una fuente de las fuerzas de seguridad israelíes, que pidió permanecer en el anonimato, declaró que “últimamente el número de atentados se había reducido, por lo que Hamas intenta seguir echando leña al fuego”. Aun así, los expertos del Shin Bet que investigan el perfil de los lobos solitarios afirman que en muchos casos estos están frustrados con las organizaciones palestinas más veteranas como Al Fatah, Hamas o la Yihad Islámica, y por eso deciden actuar por su cuenta inspirándose en el Estado Islámico liderado por Abu Bakr al Bagdadi. Así ocurrió en el atentado del centro comercial Sarona de Tel Aviv en junio del año pasado, cuando dos terroristas ametrallaron un café repleto de gente y mataron a cuatro personas. Este fue el primer ataque inspirado en ese grupo yihadista dentro de Israel.
En el caso de Fady el Kanbar, los expertos creen que se trata de una acción desesperada de alguien que proviene de sectores marginales de la sociedad desde el punto de vista socioeconómico y familiar, en lo que en el Shin Bet define como “from zero to hero” (de cero a héroe): un joven que en este caso ni era activista político ni participaba en las redes sociales y se inspiró en las últimas acciones del EI en Europa –en especial la de Berlín– y está dispuesto a pagar con su vida para aterrorizar al enemigo y lograr que sus fotos y su nombre pasen a ser reconocidos en toda Palestina. Según el propio EI, Israel no es por ahora una prioridad para los hombres del califato, aunque no se oponen a que haya palestinos que cometan ataques contra israelíes y objetivos judíos.