Mayoría por el referéndum pactado
EL electorado catalán se encuentra dividido por la mitad con respecto a la independencia, según la encuesta de GAD3 para La Vanguardia. El dato más significativo es que mientras los partidarios del sí retroceden más de seis puntos con respecto al barómetro del pasado junio, del 48,4% al 42,3%, los partidarios del no escalan posiciones, desde el 35,3% de hace medio año al 41,9%. Un empate técnico tras más de seis años de conflicto y movilización ciudadana e institucional. En cambio, se consolida la mayoría amplia que apoya la celebración de un referéndum, que son el 76,6% de los encuestados, un punto más que en la encuesta de junio; mientras que los que no lo creen viable son el 19,7%.
Si la reivindicación del referéndum como la vía para resolver el problema del encaje de Catalunya en España es la que aglutina a la mayoría de los encuestados, entre sus defensores también está claro que son más los que defienden una consulta acordada con el Gobierno español, un 59,1%, frente al 37,3% que apuesta por una convocatoria unilateral.
Otro dato interesante del sondeo que se publica hoy en este diario es el de las respuestas a la pregunta sobre la solución al encaje de Catalunya en España, respecto de la cual los encuestados se muestran divididos. Así, la vía que obtiene más apoyos, el 41,8%, es la que propone una reforma de la Constitución que contemple las demandas de Catalunya, mientras que el 23,7% no ve otra salida que la independencia y el 18,3% cree que bastaría una interpretación diferente de la Carta Magna. Sólo el 7% de los encuestados se muestra partidario de mantener el actual statu quo.
En conclusión, el independentismo sigue siendo aunque por muy poco el voto mayoritario en Catalunya a pesar de que sus expectativas se encuentran estancadas, mientras se consolida la demanda del referéndum, que la mayoría quiere pactado con el Estado. La apuesta de los comunes de Ada Colau por la consulta acordada, sin aclarar si se decantarían por el sí o el no a la independencia, y el retorno a la pantalla anterior de un sector del independentismo explican cuál es el escenario político de la Catalunya de hoy, en la que el Gobierno de Mariano Rajoy ha manifestado su voluntad de iniciar una etapa de diálogo.
La operación diálogo del PP está muy lejos de obtener la confianza de los catalanes y los casos judiciales contra Artur Mas y Carme Forcadell no ayudan. No obstante, ni la independencia ni dejar las cosas como están son opciones mayoritarias. Algo que debería hacer reflexionar a nuestros gobernantes.