El insólito viaje de una supuesta maleta bomba
Mossos y Adif se citan para acabar con el descontrol del equipaje perdido en Sants
El incidente de una maleta abandonada este miércoles, que obligó a desalojar y detener la circulación de todos los trenes en la estación de Sants, forzó ayer tarde la celebración de una reunión urgente entre los Mossos d’Esquadra y los responsables de seguridad de Adif. El objetivo, que nunca más vuelva a ocurrir la cadena de errores que se cometieron el otro día.
Es bueno contar cómo llegó esa maleta a la estación de Sants a las siete de la tarde, hora punta de viajeros. Así se entiende la urgencia en la convocatoria de la reunión y la preocupación que el mismo miércoles por la noche mostró en público el conseller de Interior, Jordi Jané, por el incidente.
El tren, fuera de servicio, llegó a las cocheras. Fue en el momento de limpiar los vagones que se descu- brió una maleta. El personal de la cochera gestionó el hallazgo como si se tratara de un objeto perdido. Sin plantear ninguna otra opción. Decidieron entonces trasladar la maleta a la estación de Sants, que es donde se encuentra el departamento de cosas que descuidan los viajeros en los trenes.
La maleta llegó a Sants en un taxi. Y una vez en la estación alguien decidió pasarla por el escáner antes de guardarla en el cuarto con el resto de objetos perdidos. Por si acaso. Y entonces llegó el susto. Después se supo que la maleta era en realidad la bolsa de trabajo de un lampista, pero el escáner mostró cables y piezas sospechosas. Saltaron las alarmas. Adif pasó a gestionar entonces la maleta como un objeto sospechoso. Alertaron a los Mossos y se activó el protocolo de amenaza de bomba.
Esa parte funcionó bien. Con la policía de la Generalitat ya activada, junto a los vigilantes de seguridad de la estación, Sants se desalojó en el tiempo previsto y se paralizó la circulación de todos los trenes. Los Tedax de los Mossos, detectores de explosivos, se dirigieron a la estación. Allí comprobaron que aquello no era un explosivo y que se trataba de herramientas y material eléctrico de trabajo. El dueño fue localizado y la emergencia solventada con éxito.
Eso sí, inmediatamente después, y en caliente, cuando los Mossos d’Esquadra y el Departament d’Interior conocieron de boca de los responsables de Adif y su personal de seguridad el tránsito de la maleta, decidieron que había que convocar una reunión urgente, la de ayer tarde, para concretar por escrito qué hacer en cada caso.
Teniendo en cuenta que hace más de un año que Catalunya, como el resto de España, se encuentra en un nivel cuatro sobre cinco de alerta antiterrorista, sorprende que a alguien se le ocurriera trasladar una maleta encontrada en un tren a uno de los puntos más concurridos de la ciudad. Adif, en su descarga, insistió en que la crisis se gestionó como si se tratara de un objeto perdido y no sospechoso. Algo que no debería volver a ocurrir.
Interior pidió al gestor ferroviario una reunión urgente para evitar repetir la cadena de errores del miércoles