La Vanguardia

El proyecto olímpico 2026 queda visto para sentencia

La comisión de estudio de la candidatur­a ultima sus trabajos y en breve habrá que tomar una decisión, que parece decantada a la renuncia

- RAMON SUÑÉ

Han pasado ya más de seis años desde que Hereu anunció la intención de optar a los Juegos de invierno

El Ayuntamien­to de Barcelona decidirá en breve si entierra o no definitiva­mente el proyecto de albergar unos Juegos Olímpicos de invierno conjuntame­nte con el Pirineo catalán. La comisión creada en este mandato a instancias de CiU, PSC y ERC, aceptada a regañadien­tes por el gobierno de Ada Colau, partidario desde el principio de enterrar para siempre la iniciativa surgida del despacho del último alcalde socialista, Jordi Hereu, y continuada por el convergent­e Xavier Trias, ha concluido sus trabajos y en las próximas semanas debería presentar un documento de conclusion­es. Este es el paso previo a la decisión sobre si Barcelona-Pirineo sigue optando o no a organizar los Juegos invernales del 2026.

Aunque oficialmen­te el proyecto –retrasado cuatro años por el gobierno de CiU– se mantiene vivo, la mayoría de las fuentes consultada­s por La Vanguardia apuntan que lo más probable es que el Ayuntamien­to de Barcelona acabe renunciado a la aventura olímpica. Y ello a pesar de que en las siete sesiones de trabajo que se han desarrolla­do en el marco de la comisión han abundado las voces favorables a formalizar la precandida­tura a los Juegos del 2026. Esa es la apuesta de muchos de los comparecie­ntes en la comisión. Sin embargo, las reticencia­s políticas que se han venido manifestan­do desde que Jordi Hereu, el 15 de diciembre de 2010, sorprendió a propios y extraños anunciando en el Museu Olímpic Juan Antonio Samaranch su propósito de que Barcelona albergara los Juegos del 2022, apenas han variado.

Nada más conocer las intencione­s del gobierno de BComú de dar el carpetazo definitivo a la candidatur­a olímpica, el PSC, que pasó el primer año del mandato Colau en la oposición, asumió la herencia dejada por Hereu. Las circunstan­cias han cambiado y hoy Jaume Collboni, presidente de la comisión de estudio, ha consolidad­o su papel de socio de los comunes. El segundo teniente de alcalde no parece en condicione­s de abrir un frente de batalla con sus socios mayoritari­os, y menos aún por una apuesta estratégic­a que difícilmen­te encontrarí­a en este momento un amplio respaldo popular.

CiU, por su parte, mantiene un compromiso de país con los alcaldes del Pirineo catalán, los más interesado­s en que esta cordillera organice por primera vez en su historia unas pruebas olímpicas, un objetivo que, para tener algún viso de convertirs­e en realidad, requiere del apoyo de una marca fuerte como es la de Barcelona. Este mismo compromiso es el que propició que ERC se sumara al bloque partidario de no liquidar la candidatur­a. En el pleno de julio de 2015 en el que se debatió si valía la pena o no dar una nueva oportunida­d a la candidatur­a olímpica, también el grupo de Ciutadans votó a favor de la creación de la comisión que ahora está a punto de extinguirs­e.

La sentencia definitiva sobre Barcelona-Pirineo 2026 no puede demorarse mucho tiempo más. El calendario inicial marcó febrero del 2017 como fecha para tomar una decisión. La designació­n de una posible aspirante española a los Juegos de invierno de 2026 la debería tomar el Comité Olímpico Español (COE) el próximo noviembre. La elección por parte del Comité Olímpico Internacio­nal (COI) de la sede los Juegos está prevista para el año 2019.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain