(Casi) todos contra Trump
Hollywood recrudece su lucha contra el nuevo presidente, y artistas que se niegan a participar en su toma de posesión graban una versión de ‘Sobreviviré’
Lucía un sol esplendoroso y cualquier abuela vaticinaba lluvia. “Me duelen los huesos”, decía para sustentar su parte meteorológico en la época predigital.
Donald Trump, que no deja de tener 70 años y actitud de viejo amargado, también lleva marcadas las isobaras en su código genético. A la que alguien le ensombrece, y hace falta bien poco, salta como un rayo y suelta un chaparrón de descalificaciones.
Da igual el terreno en el que se ponga la nube, el del espionaje o el de la farándula, el presidente electo de Estados Unidos explota con un diluvio de tuits.
Una de las convulsiones de la semana, una más, arrancó el pasado domingo. Meryl Streep, una de las figuras indiscutibles de la cinematografía estadounidense, lanzó una poderosa diatriba contra Trump. Sin citar al destinatario, un recurso que ha entronizado a la todavía primera dama, Michele Oba- ma, la intérprete de Los puentes de
Madison utilizó el púlpito de los Globos de Oro para retratar a Trump, que sintió el dolor de una estacada en su ego.
“Meryl Streep es una actriz excelente”, declaró Trump en el 2015. Pasados unos meses y a las puertas de ocupar el cargo más poderoso, el tono ha cambiado. El no citado, que calificó esta vez a Streep de “lacaya” de Hillary Clinton y de actriz “sobrevalorada”, puso en pie de guerra de nuevo a la mayoría de las estrellas del cine y la escena. “La relación con Holly-
wood ya estaba rota pero Meryl Streep unifica una voz”, sostiene Armando Lucas Correa, director de la revista People en español. “Aunque antes apoyaban a Clinton –prosigue–, esto ya no es un problema de apoyo, ahora ya se define como oposición”.
“Lo que has dicho es magnífico, se tenía que decir y lo has dicho con elegancia”, escribió Robert de Niro en una carta dirigida a su colega. Otros muchos se solidarizaron, como George Clooney. Y hubo quien tiró de sátira. “Mire, señor Trump –señaló en su programa nocturno Stephen Colbert–, usted puede negarse a difundir sus declaraciones de impuestos, puede prohibir una religión o flirtear con un dictador, pero llamar a Meryl Streep sobrevalorada, no, eso es demasiado”.
A los seguidores de Trump no parece preocuparles la situación. Incluso existe la corriente de que atacar a la “burbuja” liberal de Hollywood, para muchos otra ciénaga que limpiar, permite al presidente electo reafirmarse como el millonario antiestablishment que ha venido a salvar al pueblo.
Sucede que, por el contrario, su equipo de transición se está enfrentado a un boicot encubierto del
artisteo. A pesar del honor que supone ser invitado a actuar en la inauguración, Trump no encuentra estrellas en el país de las estrellas para decorar su fiesta.
Y mientras tanto, convocados por la revista W Magazine, un total de 21 actores (varios de ellos en las fotos que acompañan este artículo) han aceptado participar en la grabación de una versión de I will survive, sobreviviré, canción de Gloria Gaynor de 1979 que con el tiempo se ha convertido en un himno del poder femenino y del orgullo gay.
En esta especial dedicatoria, con un claro mensaje al próximo presidente, han participado Emma Stone, Natalie Portman, Matthew McConaughey, Andrew Garfield, Felicity Jones, Dakota Fanning o Amy Adams. “Es el tipo de himno que necesitamos más que nunca”, indicó la revista.
La acción a la que apeló Streep llevará a no pocas artistas (Julianne Moore, Katy Perry o Scarlett Johansson) a la marcha de mujeres que se celebra el próximo sábado en Washington. Será el día siguiente de la inauguración y se prevé tormenta