Un asesor de Trump tuvo varios contactos con el embajador ruso
El futuro consejero de Seguridad prepara la telecita del nuevo presidente con Putin
Una ley de 1799 prohíbe a los ciudadanos de EE.UU. negociar por su cuenta con gobiernos extranjeros
Donald Trump no quiso responder esta semana a la pregunta de si él o alguno de sus subordinados había mantenido contactos con Rusia antes o durante la campaña electoral. Lo que trascendió ayer fue que Michael Flynn, designado por Trump para el importante cargo de consejero de Seguridad Nacional, ha mantenido contactos frecuentes con el embajador ruso en Washington, Serguéi Kisliak, al menos después de las elecciones.
Existen dos versiones de los contactos de Flynn con el diplomático ruso. Fuentes de la Administración Obama revelaron al columnista David Ignatius, del diario que Michel Flynn habló por teléfono varias veces con el embajador Kisliak el 29 de diciembre, es decir, el mismo día que la administración de Obama anunció la expulsión de 35 funcionarios rusos y otras medidas en represalia por los ataques informáticos. Moscú se burló de la medida adoptada por Obama y evitó replicarlas. “No nos rebajaremos al nivel de una diplomacia de cocina, irresponsable, sino que contribuiremos a restablecer las relaciones ruso-estadounidenses teniendo en cuenta la política que aplicará la Administración del presidente Trump” .
La sucesión de los hechos permite sospechar que la comunicación entre el equipo de Trump y el diplomático ruso pudo servir para apaciguar los ánimos con Moscú, pero Flynn todavía no forma parte de la administración estadounidense y una ley de 1799 prohíbe expresamente a los ciudadanos de EE.UU. negociar por su cuenta con gobiernos extranjeros sobre asuntos objeto de disputa bilateral.
Cuando trascendieron los contactos de Flynn, el equipo de transición de Trump confirmó los contactos con el embajador ruso, pero puntualizando que las llamadas se realizaron antes de las sanciones y que no se habló de los ciberataques, sino que tenían como objetivo felicitar las Navidades y expresar condolencias a Kisliak por la muerte en atentado del embajador ruso en Ankara el 19 de diciembre. El 28 de diciembre se contactó con el embajador ruso para expresarle también las condolencias por el derribo de un avión ruso en Siria, pero en esta segunda llamada Flynn planteó los preparativos para que Donald Trump y Vladímir Putin puedan tener una primera conversación oficial por teléfono o teleconferencia después de la toma de posesión del 45.º presidente prevista para el 20 de enero.
Incluso las conversaciones de cortesía generan controversia, puesto que Flynn no tiene todavía ninguna atribución institucional y su actuación en un momento tan conflictivo de las relaciones entre Washington y Moscú equivale a puentear a la autoridad legítima de Estados Unidos. Si a ello se añade la trayectoria conocida de Flynn, las conjeturas se disparan.
Michael T. Flynn es un general retirado que ha tenido vínculos empresariales con Rusia. Hasta ahora era comentarista habitual del canal de televisión Russia Today, que la CIA considera el principal instrumento de propaganda del Kremlin. En el 2015 Flynn fue invitado a una gala en Moscú y se sentó a la mesa junto a Putin como invitado de honor.