Colau supera la cuestión de confianza al no presentarse una alternativa
Los grupos de la oposición del Ayuntamiento de Barcelona agotaron ayer el plazo para presentar un candidato alternativo a la alcaldesa Ada Colau. Esta supera de este modo la cuestión de confianza a la que se exponía al no conseguir durante el pasado diciembre aprobar los presupuestos municipales para este año. Las distintas formaciones políticas, a pesar de una tentativa inicial de CiU, no han conseguido ponerse de acuerdo –apenas lo han intentado– para desbancar a Colau, por lo que las cuentas quedarán aprobadas mañana de forma automática, una vez se publiquen en el Butlletí Oficial de la Província (BOP).
El abanico ideológico en la bancada de la oposición ha hecho imposible cualquier acercamiento para formar un gobierno alternativo. De hecho, ya desde antes de que la alcaldesa anunciase que se sometería a este trámite –lo mismo tuvo que hacer Xavier Trias hace unos años– todos los grupos daban por descontado que sus diferencias impedirían arrebatarle el poder a Colau. Sí consiguieron rechazar en bloque las ordenanzas fiscales y los presupuestos, obligando así al gobierno de BComú a recurrir a la cuestión de confianza. La misma alcaldesa, en el pleno en el que se inició el trámite de la cuestión de confianza, animó a la oposición a formar un gobierno alternativo, sabiendo de antemano que eso era prácticamente imposible. La semana pasada, Colau incluso se permitió alcanzar sendos pactos con los grupos de ERC y CiU que propiciarán que en el pleno del próximo viernes se aprueben el plan de alojamientos turísticos y el plan de vivienda.
Precisamente, ayer el presidente del grupo municipal del PP, Alberto Fernández, cargó contra CiU y ERC por esta decisión. Criticó que ambas formaciones nacionalistas planteasen hace un tiempo estudiar alternativas a la alcaldía de Colau para luego acabar dando aire al gobierno de BComú y facilitando estos dos importantes acuerdos. Para Fernández, “cuando el marcador se puso a cero para intentar perfilar una alcaldía alternativa a Colau, en realidad se iniciaba la cuenta atrás para ratificarla como alcaldesa”. En este sentido, el concejal del PP sentenció que CiU y ERC, que en Parlament son Junts pel Sí, en Barcelona son “Junts per Colau”.
El presupuesto barcelonés para este año está cifrado en 2.580 millones de euros, lo que comporta un incremento de un 4,7%, más de 100 millones de euros más que en el ejercicio anterior.