La Fed opta por la prudencia ante Trump y no toca los tipos de interés
La Reserva Federal (Fed) toma el camino de la prudencia tras la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca. El banco central de Estados Unidos constató un incremento del optimismo entre los consumidores y el mundo de los negocios, pero decidió por unanimidad no tocar los tipos de interés a la espera de cómo evoluciona la nueva administración.
El comunicado emitido ayer, al concluir los dos días reunión, no ofrece pistas concretas sobre cuando, a lo largo de este 2017, tiene previsto realizar una nueva subida de los tipos. Así, la Fed mantiene los intereses en el rango entre el 0,5% y 0,75%, tras el incremento de un cuarto de punto aprobado el pasado diciembre. Esa fue la segunda subida en más de un decenio y entonces sugirió que habría tres más en el 2017.
En el comunicado se describe un panorama de confianza en la economía del país. En concreto, se indica que el mercado laboral continúa siendo sólido, la inflación se acerca al nivel del 2% y observan una mayor satisfacción. “Los indicadores del sentimiento de los consumidores y de los negocios han mejorado últimamente”, se afirma.
El índice de desempleo se halla en el 4,7%, prácticamente el pleno empleo según el baremo de la Fed, mientras que observan una inflación más persistente que, a medio plazo, llegará a la meta del 2% a la que aspiran.
Las promesas de Trump de estimular el crecimiento de la economía al 4% con una política de bajada de impuestos, inversiones en
La Reserva Federal ve optimismo en el consumo y los negocios pero no da pistas de una próxima subida
infraestructuras o la renegociación de los tratados comerciales puede disparar esa inflación y, por tanto, precisar de un incremento de la tasas con mayor frecuencia.
La decisión de la Reserva Federal, en línea con los pronunciamientos de su presidenta, Janet Yellen, cumplió con las expectativas de los analistas. Los inversores tienen más confianza de que la próxima subida se adopte en la reunión de mediados de marzo.
Pero los expertos se esperaban un lenguaje más preciso y concreto sobre esa posibilidad en el texto redactado ayer.
La Fed remarcó que los riesgos están “aproximadamente equilibrados”. Esto supone que los gobernadores del banco central consideran que la economía puede ir a mejor o a peor en términos idénticos. De ahí el propósito de vigilar de cerca los indicadores de inflación, de la economía global y de los asuntos financieros.