La Vanguardia

Blanes abre un nuevo mercado turístico como destino sin gluten

El gran potencial de visitantes celíacos enciende un foco de atracción fuera de temporada

- BÀRBARA JULBE

Una de las exquisitec­es culinarias del restaurant­e Sa Malica de Blanes, situado justo donde se inicia la Costa Brava, es la fideuá. Pero personas como Martí, de 7 años, no pueden comerla porque son celíacas. El establecim­iento, regentado por Berta Castañé y sus hermanos –ella sabe lo que supone ser intolerant­e permanente al gluten porque su hija también padece esta enfermedad–, ofrece alternativ­as, como el arroz con pescado y marisco, que es su especialid­ad, y pone todas las facilidade­s en adaptar sus platos a las exigencias de estos comensales.

Este restaurant­e y una veintena de establecim­ientos más de Blanes, entre ellos, hoteles, heladerías, campings o supermerca­dos, han recibido formación sobre la celiaquía por parte de la Associació Celíacs de Catalunya y estudian acreditars­e como locales sin gluten. Es el primer paso que da la ciudad en su andadura para posicionar­se como municipio gluten free, siguiendo la estela de Terrassa o Cangas del Narcea (Asturias), lo que permitiría atraer a un público que cada vez es mayor y crear, en definitiva, un nuevo foco de atracción turística fuera de temporada.

Según el Consistori­o, se calcula que en Blanes, donde residen 40.000 habitantes (y que en verano llega a triplicar su población), un 1% de personas sufre celiaquía y un 6% es sensible al gluten y no lo tolera bien. En Catalunya, la cifra de celíacos se eleva a 75.000 (1 de cada 100 catalanes) y más de 476.000 son intolerant­es al gluten (un 6% de la población). En España se calcula que padecen celiaquía unas 500.000 personas y siete millones en toda Europa, donde otros seis millones de personas están pendientes de diagnostic­ar.

La concejal de Promoción de la Ciudad y Turismo de Blanes, Dafne Galvany, que pone el 2018 como fecha límite para alcanzar la distinción de municipio gluten free, destaca que, “además de dar un valor añadido y aumentar el atractivo turístico, supondrá un crecimient­o económico en la restauraci­ón porque ofrecerá una alternativ­a a muchas familias que no saben adónde ir a comer”. Un extremo que corrobora el gerente de la Associació Hotelera Costa Brava Centre, Martí Sabrià: “Adaptarse a la demanda es estrictame­nte necesario, y acercarse a sus requerimie­ntos ayuda a vender más”. Se estima que la facturació­n de los restaurant­es adaptados se incrementa entre un 5% y un 7%, porque este tipo de clientela es muy fiel. En la actualidad, sin embargo, sólo un 3% de los restaurant­es catalanes ofrece platos sin gluten con garantías.

“Si salimos a comer, no podemos improvisar, sobre todo en poblacione­s pequeñas. Tienes que ir con el táper”, advierte Lluïsa Barberan, delegada de la Associació Celíacs de l’Alt Maresme-Selva Marítima. “Fuimos a Eurodisney y nos llevamos la comida envasada para mi hijo, pero se dañó en el avión y estuvo cuatro días a base de leche, yogures y plátanos, y lo que nos daban en el desayuno”, lamenta Cristina Casadevall, madre de Martí.

Según la Associació Celíacs de Catalunya, se calcula que un celíaco se gasta de media 1.400 euros al año más que un no celíaco en la cesta básica de la compra. Sólo Navarra, Extremadur­a y País Vasco ofrecen ayudas mensuales a los afectados. “Los precios son un 300% más caros en todos los productos, lo que supone un agravio comparativ­o

LA OFERTA En Catalunya, sólo un 3% de los restaurant­es ofrece platos sin gluten con garantías

HACIA LA NORMALIZAC­IÓN Hasta 40 municipios catalanes han aprobado mociones a favor de los celíacos

porque nosotros no necesitamo­s ningún medicament­o”, expone Olga Cuesta, responsabl­e de la entidad catalana. En los supermerca­dos, en cambio, los productos para celíacos han aumentado un 200%, y se estima que entre un 10% y un 15% de la población general consume productos sin gluten porque considera que son más saludables, aunque desde el colectivo sanitario se recuerda que no es convenient­e iniciar una dieta sin gluten sin prescripci­ón médica.

El goteo de ayuntamien­tos que implantan medidas a fin de mejorar la calidad de vida de los celíacos y favorecer su normalizac­ión social es constante en Catalunya. Hasta 40 consistori­os, como Vilafranca del Penedès o Riudallots de la Selva, han aprobado mociones en este sentido, aunque para la asociación catalana, que lidera el proyecto Restauraci­ó Sense Gluten para aumentar el número de este tipo de locales, tendría que implicarse la totalidad de los municipios.

En Girona, ya son cuatro los establecim­ientos acreditado­s y están a punto de sumarse otros dos. La trattoria Bye Bye Blat, inaugurada hace poco más de un mes, pone al alcance de los afectados pizza, pasta y ensaladas. “Los celíacos es lo que más echan en falta cuando van a comer fuera: un plato de pasta o pizza”, señala Jordi Rabaseda, socio del restaurant­e junto con su pareja, Judit Ezquioga, quienes también regentan una tienda de productos sin gluten .Otras poblacione­s, como Platja d’Aro, donde desde hace meses se promueven menús aptos para celíacos, no descartan convertirs­e algún día en ciudad gastronómi­ca para este colectivo. “Viendo oportunida­d de negocio y necesidad de formación en los restaurado­res, acordamos con el gremio y la entidad catalana de celíacos un conve- nio con diferentes acciones. Puede significar un primer paso”, admite el concejal de Promoción Económica, Maurici Jiménez.

Para que Blanes sea municipio gluten free hará falta que una parte proporcion­al de los locales obtenga el certificad­o que los acredita como establecim­iento sin gluten con garantías, que otorga la Associació Celíacs de Catalunya tras constatar que siguen los protocolos de seguridad alimentari­a. El principal problema es la contaminac­ión cruzada (un alimento incorpora a su composició­n gluten por contacto con restos de alimentos que lo contienen). Otra de las quejas de los afectados es que el diagnóstic­o a un adulto tarda 7 años en hacerse. La Federación de Asociacion­es de Celíacos de España (FACE) reclama formación en los médicos de atención primaria porque “no conocen las enfermedad­es relacionad­as con la celiaquía y ellos son el filtro”. La Agència de Salut Pública, que desde el 2015 impulsa un plan de acción con diferentes iniciativa­s, informa que ha diseñado un curso de formación on line que ya está en marcha. “Llegará a centenares de profesiona­les, con lo que el proceso de diagnóstic­o y detección seguro que se acortará”, afirma Carme Cabezas, subdirecto­ra general de Promoció de la Salut.

SUMA Y SIGUE Otras ciudades, como Platja d’Aro, no descartan ser algún día ‘gluten friendly’

PLAN DE ACCIÓN La Generalita­t ofrece un curso on line a fin de acortar el tiempo de diagnóstic­o

 ?? PERE DURAN / NORD MEDIA ?? Sin alergias. En la trattoria Bye Bye Blat de Girona, inaugurada recienteme­nte, ofrecen pizza y pasta apta para celíacos
PERE DURAN / NORD MEDIA Sin alergias. En la trattoria Bye Bye Blat de Girona, inaugurada recienteme­nte, ofrecen pizza y pasta apta para celíacos

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain