Luz verde a un hotel y un interior de manzana junto al paseo de Gràcia
La operación incluye la construcción de un cinco estrellas donde estaba el teatro Novedades
El primer proyecto hotelero tras la aprobación del plan especial urbanístico de alojamientos turísticos (Peaut), que restringe las nuevas aperturas, echa a andar y lo hace en pleno centro de Barcelona. La comisión de gobierno del Ayuntamiento otorgó la semana pasada la licencia de obras que permite la transformación del antiguo hotel Novedades, el teatro del mismo nombre y las salas de billares que estaban situadas en el sótano del inmueble de la calle Casp en un único establecimiento turístico. Aunque hora ha recibido por fin la luz verde, no es este un proyecto nuevo. Hace años que empezó a gestarse esta operación urbanística e inmobiliaria que comportará, además, la creación de un interior de manzana –en un área con pocas zonas verdes–, un gran aparcamiento y locales comerciales. Esta intervención inmobiliaria dará pie, asimismo, a la ampliación de la tienda Zara de paseo de Gràcia con Gran Via, que se convertirá en una de las mayores de esta marca en el mundo.
La cadena Meliá explotará el hotel, que contará con 164 habitaciones. El camino hasta lograr la licencia de obras –en breve podrán empezar los trabajos de derribo– no ha sido fácil. La moratoria hotelera dejó en suspenso su tramitación al igual que una treintena de proyectos más en la ciudad. El despacho OUA (Oficina d’Urbanisme i Arquitectura) fue el encargado de la tramitación del plan de mejora urbanística (PMU) –aprobado con anterioridad– que afecta a esta manzana. Antes de que se decretara la suspensión de licencias, había obtenido el certificado urbanístico previo que ha permitido que el proyecto pueda salir adelante.
Con todo, el proyecto del nuevo hotel, que ocupará los números 1 al 13 de la calle Casp, ha sufrido bastantes
El proyecto tenía el certificado previo que le ha permitido sortear la suspensión de licencias Es el primer hotel que empezará obras tras la aprobación del plan de alojamientos turísticos
modificaciones desde su presentación ya hace algunos años. Cambios en la volumetría o en el acceso a la zona verde que habrá en su interior. Todo ello con el objetivo de integrarlo mejor en el entorno y en su céntrica ubicación, según señala el equipo de arquitectos.
El número de metros cuadrados previstos inicialmente en el PMU se ha reducido y se ha controlado sobre todo la convivencia del edifi-
cio con la casa Rocamora, la finca vecina, que está catalogada y que se encuentra en el chaflán del paseo de Gràcia y Casp.
Así las cosas, finalmente se ha diseñado un inmueble de diversos volúmenes que alcanzará las siete plantas de altura más planta baja. La diferencia de alturas de la edificación permitirá disponer de unas terrazas ajardinadas. Además se ha intentado que la transición entre la casa Rocamora y el hotel, de un diseño más moderno, sea lo más suave posible, un punto en el que, como en el de las alturas, han incidido los técnicos municipales. Por eso, el establecimiento hotelero se revestirá de piedra artificial de una tonalidad similar a la de la finca protegida. También se ha cuidado que la terraza superior no desentone con el pavimento de la casa Rocamora.
El hotel dispondrá de una piscina cubierta en la séptima plana y de servicios en la terraza superior. En el subsuelo se habilitará un aparcamiento con 446 plazas para coches, 47 para motos y 58 para bicicletas que también dará servicio a los clientes del hotel.
Pero quizás lo que más llama la atención del proyecto es que la planta baja del hotel dará acceso a un interior de manzana de 734 m2, todo un lujo en una zona del Eixample con muy poca superficie ajardinada. El paseo de Gràcia sólo cuenta en la actualidad con los jardines públicos del Palau Robert, en el otro extremo de la avenida. El nuevo espacio verde contribuirá a paliar este déficit del gran paseo comercial.
La entrada al jardín se hará por la calle Casp, justo por donde se ubicará la recepción del establecimiento hotelero. Por encima discurrirá una galería acristalada con vistas al interior de manzana que será de uso hotelero. Durante la noche, este espacio, como ya ocurre con la mayoría de interiores de manzana de la ciudad, permanecerá cerrado al público.
El proyecto también incorpora dos locales comerciales en planta baja en una zona muy demandada de la ciudad y prevé la ampliación de la tienda Zara de la Gran Via. Esta operación urbanística va por otros cauces y sus obras no dependen de la licencia de obras necesarias para actuar en el antiguo Novedades. La intención del grupo Inditex es convertir este establecimiento en su tienda insignia en España y en una de las mayores de la cadena en todo el mundo.
La finca del antiguo teatro Novedades comunica con la tienda de Zara, que ahora cuenta con 2.500 m 2 dividido sen tres plantas. Tras la
ampliación, sumará casi 5.000 m2. Inditex obtuvo la licencia por silencio administrativo en la última etapa del mandato de Xavier Trias, algo que ya ocurrió con la nueva tienda que H&M inauguró hace una semana en la esquina de enfrente del paseo de Gràcia.
Los promotores de la operación están ahora a la espera de la licencia de derribo para empezar cuanto antes las obras tras el parón causado por la moratoria hotelera y la revisión del proyecto.
La intención es invertir cerca de 40 millones de euros en esta intervención urbanística.
La ampliación del actual Zara le permitirá doblar la superficie El interior de manzana tendrá más de 700 m2 y se accederá a él por la calle Casp