Rajoy descarta ver a Puigdemont otra vez si es para el referéndum
El presidente hace una llamada a la Generalitat a “volver a la sensatez”
En la Moncloa aseguran que nadie de la Generalitat ha pedido fecha para una nueva reunión entre el presidente Mariano Rajoy y el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, tras el almuerzo que mantuvieron ambos el 11 de enero y que no trascendió hasta que ayer lo desveló La Vanguardia. Por esa razón extraña en el Ejecutivo la insistencia del Govern en exigir en público que Madrid ponga fecha a un encuentro entre ambos líderes.
Fuentes próximas al presidente del Gobierno aseguran que “la obsesión” de los nacionalistas catalanes con una reunión para hablar del referéndum dificulta la celebración de otra entrevista, porque si algo se constató en aquel encuentro es que la Generalitat sólo quiere hablar del referéndum mientras que el Gobierno central cree que hay otras prioridades.
Lo reiteró ayer el propio Mariano Rajoy, en declaraciones a la prensa en los pasillos del Congreso: “Lo que no puedo tratar, y todo el mundo lo sabe, es cómo me pongo de acuerdo con los señores independentistas para saltarnos la ley, y por lo tanto yo no puedo autorizar un referéndum que pretende lisa y llanamente liquidar la soberanía nacional, y que la inmensa mayoría de los españoles no puedan opinar sobre lo que quieren que sea su país”.
Por eso, Rajoy volvió a hacer un llamamiento a la Generalitat a que abandone esa vía. “Creo que es el momento de volver a la sensatez, al sentido común, y terminar con esto, que lleva ya cinco años y que no ha conducido absolutamente a nada positivo para los ciudadanos de Catalunya”.
Mariano Rajoy lo quiere dejar claro para futuras ocasiones. Si se reunen, tendrá que ser para hablar de otros asuntos para los que las puertas de la Moncloa están abiertas: “Mi disposición es la mejor, y yo efectivamente quiero hablar -dijo-, pero quiero hablar de los problemas reales y no de liquidar ni España ni la ley”.
Ese fue también el planteamiento de Mariano Rajoy en el encuentro del 11 de enero con Carles Puigdemont, y así lo reconoció el presidente del Gobierno al ser preguntado en los pasillos del Congreso por la reunión dada a conocer por La Vanguardia. Un planteamiento que a juicio de Mariano Rajoy “coincide con una gran mayoría de personas en Catalunya”. E insistió: “Nosotros queremos tratar de los problemas que afectan a la gente”. Y por eso trató en ese encuentro de que Puigdemont acudiera la conferencia de presidentes que se celebraba seis días después “como lo hacen el resto de presidentes autonómicos”, a pesar de que el president de la Generalitat ya había anunciado que no iría.
Hablar en la Conferencia de Presidentes, y en cualquier futura reunión, “de la financiación autonómica, de las infraestructuras, de la dependencia, del empleo, de los problemas demográficos que hay en España, de los presupuestos, de las inversiones”, esa era la voluntad de Rajoy.
El presidente del Gobierno añadió su deseo de que “todos hagamos un esfuerzo para recuperar la cohesión interna”. Porque al presidente del Gobierno le preocupa que “la Generalitat esté condicionada por grupos extremistas” lo que “puede afectar al modelo económico y social de Catalunya. Me gustaría tratar todo eso”.
La imposibilidad de iniciar un diálogo con la Generalitat que orille el referéndum de autodeterminación es una de las razones por las que la vicepresidenta del Gobierno –que el domingo volverá a estar en Barcelona– inició la llamada operación diálogo con otros representantes de distintos sectores de la sociedad catalana y con representantes municipales, a los que trata de hacer llegar sus planteamientos ya no sólo sobre el proceso independentista, que son de todos conocidos, sino sobre los proyectos y las ayudas que el Estado está dispuesto a poner en marcha para Catalunya. Y si no puede ser a través de la Generalitat se buscarán otras vías. Un mensaje que, según el Gobierno, está calando entre los sectores de la sociedad civil para los que el Ejecutivo considera que la lección del Brexit ha sido una lección sobre los peligros de jugar con fuego.
CARMEN DEL RIEGO Rajoy mantiene el diálogo para hablar de inversiones, financiación o presupuestos “No puedo autorizar un referéndum que liquide la soberanía nacional”