La creatividad fiscal autonómica no hace crecer la recaudación
Los impuestos propios sólo suponen el 2,2% del total ingresado
El Consejo General de Economistas y el Registro de Asesores Fiscales (ReafRegaf) perciben “cierta teatralidad” en las modificaciones tributarias realizadas por las comunidades autónomas, en palabras del presidente del Consejo General de Economistas, Valentí Pich. De hecho, la hiperactividad normativa de los últimos años tiene un peso, evaluado en un estudio de este organismo, equivalente sólo al 2,2% de la recaudación tributaria de las comunidades autónomas en el 2015. De hecho, existen 79 impuestos propios aprobados por las comunidades. Algunos de ellos están en suspenso, bonificados al 100% o simplemente declarados inconstitucionales.
Pich advirtió ayer que aprobar impuestos “vale mucho dinero” y provoca conflictos a nivel judicial que también conllevan un gasto. Por ello, ante la actual estructura fiscal autonómica, y ante el anuncio de la aprobación de nuevos impuestos medioambientales, opina que se requiere una revisión “en profundidad” del actual sistema de financiación autonómico, ya que resulta “excesivamente complejo”, si se consideran además los 677 cambios normativos registrados en el esquema fiscal autonómico. La reforma de la financiación, a su entender, “es muy conveniente”, pero “no va a ser fácil” y conllevará también la de algunos impuestos cedidos, abogando por la supresión del impuesto de patrimonio y una mayor igualdad, al menos en los tipos mínimos, en el de sucesiones.
Pich indicó también que las comunidades
El 83,36% de los ingresos impositivos procede de los grandes impuestos, del IRPF (35,7%) e IVA (31,62%)
autónomas “juegan a bajar y subir impuestos, pero en realidad la incidencia que eso tiene en el presupuesto es mucho menor que la que tiene de cara a los votantes”. Y reiteró que el sistema autonómico es “poco transparente, espeso e insostenible” y “fomenta debates territoriales e institucionales estériles”.
La mayor parte de los ingresos impositivos de las comunidades autónomas corresponden a su participación en los grandes impuestos y sólo en el IRPF tienen alguna capacidad normativa. En concreto, los ingresos impositivos por los grandes impuestos suponen el 83,36%, distribuidos entre el IRPF (35,7%), IVA (31,62%) e impuestos especiales (16,04%).
El estudio concluye que las desigualdades entre comunidades son “muy diferentes”. Las desigualdades entre comunidades oscilan, en el caso del IRPF y según las rentas, entre el 6% y el 21%, mientras que en el caso de transmisiones patrimoniales pueden variar las máximas entre el 40% y el 67% y en actos jurídicos documentados son de hasta el 100%. En el impuesto de patrimonio y el de sociedades las diferencias pueden ser “radicales”.
Según el estudio presentado ayer, Madrid se mantiene como la comunidad española con los impuestos más bajos. Asimismo, y en relación con las rentas del trabajo, Catalunya es la comunidad autónoma que más IRPF paga en ingresos medios anuales de 30.000 euros, 273 euros más que los madrileños que, en este tramo de renta, son los que menos aportan.