La Vanguardia

Tatiana Calderón

PILOTO

- TONI LÓPEZ JORDÀ Montmeló

La escudería Sauber ha decidido apostar por Tatiana Calderón (23) como piloto de desarrollo de fórmula 1 para esta temporada. El sueño de la colombiana es convertirs­e en piloto oficial. Hace 40 años que una mujer no lo consigue.

María de Villota (Marussia, 2012), Simona de Silvestro (Sauber, 2014), Susie Wolff (Williams, 2012-15), Carmen Jordà (Lotus/ Renault, 2015-16), y ahora Tatiana Calderón (Sauber). Esta joven colombiana de 23 años (Bogotá, 10/ III/1993) de mirada cándida, figura ligera y voz dulce es la última mujer piloto que se ha sumergido en la piscina de tiburones de la F-1. Se ha obstinado en ser piloto del gran circo. “Sí, mi objetivo es llegar a la F-1 y por eso estoy aquí, porque creo que es posible y voy a hacer lo que esté a mi alcance para que así sea”, confiesa con determinac­ión a La Vanguardia en su primer día vestida de Sauber como “piloto de desarrollo (driver developmen­t)” del equipo suizo para el 2017. “Un día increíble para mí porque llevo trabajando 13 años. Estar vinculada a un equipo de F-1 es una superoport­unidad que cualquier piloto mataría por tener. Y hoy me la ha dado Sauber. Es un día que recordaré mucho tiempo”.

Tatiana Calderón Noguera lleva desde los 9 años pilotando, soñando con suceder a su ídolo Juan Pablo Montoya (Williams, 2001-04; McLaren, 2005-06) como el siguiente colombiano en competir en la F-1, el cuarto, más de once años después. Ha ido dando los pasos que tocaban, el karting, la F-3 Británica, el campeonato europeo de F-3, el MRF Challenge F-2000 y la GP3, en la que fue 21.ª el curso pasado y en la que repetirá este 2017 con el equipo francés DAMS (por donde pasaron Carlos Sainz, Kevin Magnussen, Marcus Ericsson, Romain Grosjean o Pastor Maldonado, entre otros).

Este es un hecho significat­ivo: Calderón compaginar­á la tarea de piloto de desarrollo (que no reserva) con la competició­n en la GP3, “la gran diferencia” –señala– respecto a sus cuatro predecesor­as recientes que pisaron la F-1: dejaron de competir cuando entraron al gran circo.

Ni la malograda Villota (fallecida tras un accidente en unas pruebas de aerodinámi­ca en el 2012), ni la suiza De Silvestro (apeada por los problemas financiero­s de Sauber), ni la alicantina Jordà (olvidada en Renault), ni la escocesa Wolff (esposa de Toto, el jefazo de Mercedes, la única que llegó a rodar en ensayos libres del viernes) tuvieron recorrido en la F-1 más allá del impacto puntual, por novedoso y atrevido, de un gesto aperturist­a con el género femenino. Mera campaña de marketing en algún caso.

Tatiana Calderón espera no ser una piloto más, carne de olvido, arrinconad­a por la falta de oportunida­des, como su predecesor­a en Sauber. “Son roles y tiempos diferentes. Simona era piloto afiliada y dejó de correr ese año que estaba con Sauber; y Carmen y Susie venían de sitios diferentes. Yo tengo la posibilida­d

EL SUEÑO DE LA PILOTO “Ojalá pueda demostrar mi potencial para que algún día me den la oportunida­d de correr en la fórmula 1” SAUBER, LA ESCUDERÍA MÁS FEMENINA El equipo suizo tiene una directora, Monisha Kaltenborn, una ingeniera de estrategia y una ‘dircom’

de estar compitiend­o, además de tener este rol de piloto de desarrollo”. Una tarea que consistirá “en viajar a algunas carreras para aprender cómo funciona un equipo de F-1, trabajar con los ingenieros, cuyas enseñanzas podré poner en práctica en la GP3, y sesiones de simulador en Hinwil (la fábrica de Sauber)”, detalla Calderón. Además de la “posibilida­d, todavía no confirmada, de hacer un test con el coche de F-1 a final de temporada”.

Casi como un cuento de hadas, con la pretensión última, histórica, insólita, de entrar en un club exclusivo de hombres, el de los 20 mejores pilotos del mundo. Un logro, correr en la F-1 (en carrera de Gran Premio), que sólo consiguier­on dos mujeres italianas, Maria Teresa de Filippis (1958-59) y Lella Lombardi (197476). La lejana prehistori­a para Tatiana Calderón, que en su nuevo rol y con su nueva camisa estrenados en Montmeló empieza a construir su sueño. “Combinar estos dos programas es increíble. Voy a estar evoluciona­ndo como piloto, el equipo podrá ver mi progreso con todo lo que me van a enseñar. Ojalá pueda demostrar de lo que estoy hecha, el potencial que tengo, para que algún día me den la oportunida­d de correr en la F-1, que es mi objetivo, mi sueño”, se esperanza.

Una ilusión que la colombiana alimenta en la idiosincra­sia del equipo que la ha fichado, Sauber, el más sensible con la causa femenina: lo dirige Monisha Kaltenborn –desde el 2010, la primera mujer Team Principal–, tiene una ingeniera de estrategia, Ruth Buscombe (26 años, procedente de Haas y Ferrari), y una directora de Comunicaci­ón, Marleen Seilheimer. “Hay un montón de mujeres y eso muestra el cambio que está surgiendo. Los tiempos están cambiando, la gente está más abierta a ver mujeres en todos los ámbitos del automovili­smo. Sauber es un ejemplo perfecto. Ojalá den también la oportunida­d de llegar a la máxima categoría a una piloto”, anhela Calderón, agradecida a Kaltenborn por su confianza.

 ??  ??
 ?? JAMES MOY / EFE ?? Estreno en Montmeló.Tatiana Calderón, residente en Madrid, se estrenó en el Circuit de Barcelona como piloto de desarrollo deSauber
JAMES MOY / EFE Estreno en Montmeló.Tatiana Calderón, residente en Madrid, se estrenó en el Circuit de Barcelona como piloto de desarrollo deSauber

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain