Suecia recupera el servicio militar por la tensión con Rusia en el Báltico
Suecia recuperará el servicio militar obligatorio el año que viene ante las dificultades que está teniendo para reclutar a militares de forma voluntaria en un momento de escalada de la tensión con Rusia en el Báltico.
La medida, anunciada ayer por el Gobierno de coalición entre socialdemócratas y verdes, implica que 13.000 jóvenes nacidos en 1999, hombres y mujeres (por primera vez), serán llamados por el ejército el próximo 1 de julio. Esta cifra incluirá a voluntarios y reclutas. Después de pasar las pruebas pertinentes, 4.000 de ellos serán seleccionados para empezar, el 1 de enero del 2018, la formación militar, que durará entre nueve y doce meses.
“Hemos tenido problemas para encontrar personal para las unidades militares de forma voluntaria y hay que ponerle remedio de algún modo”, argumentó el ministro de Defensa, el socialdemócrata Peter Hultqvist. El ministro apuntó a “una nueva situación de seguridad”.
Suecia, un país asociado a la OTAN aunque no forma parte de la Alianza, eliminó el servicio militar obligatorio, entonces exclusivamente masculino, en el 2010. Desde la caída de la URSS, se había ido suavizando.
Sin embargo, después de la anexión rusa de Crimea, en el 2014, la actividad militar en el Báltico se ha intensificado, con ejercicios militares rusos. En otoño del 2014, las autoridades suecas denunciaron la presencia de un submarino en sus aguas, apuntando a Rusia sin mencionarla, aunque meses más tarde se descartaron las fotos tomadas por particulares, la prueba principal.
Suecia ha impulsado en los últimos dos años varias medidas para reforzar su defensa, apelando al empeoramiento de la seguridad por las tensiones con Rusia. En septiembre, reenvió una guarnición permanente a Gotland, una isla situada entre Suecia y las ex repúblicas soviéticas del Báltico (Estonia, Letonia y Lituania).
También ha aumentado el presupuesto de defensa un 5% entre el 2016 y el 2020 para modernizar armamento. La oposición presiona al Gobierno para que aumente todavía más la partida, una reclamación a la que hace unos días se sumó el jefe de las fuerzas armadas, Micael Bydén, quien aseguró que necesita 6.500 millones de coronas (681 millones de euros) más hasta el 2020 para cumplir con sus necesidades de personal y de material.
Hultqvist subrayó que el nuevo sistema sigue el modelo de Noruega, que en el 2013 introdujo el servicio obligatorio para ambos sexos. Se convirtió en el primer país de la OTAN que lo hacía, uniéndose a un pequeño grupo de países del mundo, entre los que se cuenta Israel.