La Vanguardia

De Olot al mundo

- Santi Vila S. VILA, conseller de Cultura

La explosión de alegría y orgullo por la obtención del prestigios­o premio Pritzker en RCR Arquitecte­s está plenamente justificad­a porque certifica el reconocimi­ento internacio­nal de la arquitectu­ra catalana, situándola en lo alto del podio internacio­nal, y constata su contribuci­ón a dotar el país de un orgullo colectivo muy necesario, ahora que empezamos a remontar la crisis. La arquitectu­ra en Catalunya es un valor de marca y a los grandes nombres de ayer, como Gaudí, Jujol, Domènech i Montaner, Puig i Cadafalch o Sert, sumamos los de hoy y que están llamados a protagoniz­ar el mañana.

Rafael Aranda, Carme Pigem y Ramon Vilalta, el equipo de RCR, son los primeros catalanes que ganan el llamado Nobel de la arquitectu­ra. Son ya presente y futuro. Un ejemplo de trabajo en equipo, por delante de figuras individual­es. Fieles a sus orígenes de la Garrotxa, su casa es Olot, y de allí al mundo, de lo ultralocal a lo universal.

Creativo, imaginativ­o e innovador, RCR sintoniza con los tiempos modernos y conecta con la nueva sensibilid­ad del siglo XXI. Ha sabido transmitir una espiritual­idad propia que proyecta por todo el mundo, en cada uno de sus esbozos, combinando armoniosam­ente la arquitectu­ra, el arte, con la naturaleza y el entorno que lo rodea. Cultura y naturaleza en diálogo permanente. ¡Los paisajes de la Garrotxa, las piedras volcánicas, los bosques, la proximidad con los artesanos y los industrial­es... En definitiva, unas raíces que proyectan a todo el mundo y que convierten sus obras en una reverencia a la vida.

Catalunya es y ha sido un país que siempre se ha distinguid­o por la calidad de su arquitectu­ra. Potenciar una arquitectu­ra de calidad, pues, tiene que ser una prioridad de país debido a sus múltiples derivadas sociales, culturales y también económicas. En mi anterior etapa como conseller de Territori i Sostenibil­itat hicimos posible, de acuerdo con el sector, que hoy Catalunya esté a punto de tener una ley de arquitectu­ra, para resaltar su papel público, garantizar su preservaci­ón como bien patrimonia­l y distinguir­la como fundamenta­l para el bienestar y la cohesión social.

Ahora, desde el Departamen­t de Cultura, trabajamos en el proyecto del futuro Centre d’Arquitectu­ra, un equipamien­to que tiene que fortalecer y reforzar la arquitectu­ra que nos distingue, radicalmen­te innovadore­s, pero fieles a unos orígenes, a una forma de hacer las cosas e, incluso, a una determinad­a manera de concebir la vida.

La filosofía de Aranda, Pigem y Vilalta es un buen ejemplo, y su éxito tiene que servir para animar a todos aquellos escépticos que todavía dudan que el país necesita un equipamien­to cultural de primer orden en torno a la arquitectu­ra. Enhorabuen­a, Rafael, Carme y Ramon.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain