Cita sexual con trampa en la red
Un joven de Terrassa recibe una brutal paliza tras una discusión en internet con una chica
El delito se gestó en las redes sociales y los Mossos han tirado del primer hilo para su resolución gracias a las pistas dejadas en ese mundo virtual. Cinco adolescentes, dos chicos y tres chicas, han sido arrestados en Terrassa después de urdir un plan para vengarse de un joven horas después de mantener una conversación por internet con una antigua compañera de instituto. A la chica no le gustaron algunas afirmaciones (relacionadas con su entorno y vida familiar) que su antiguo compañero escribió en esa conversación. Y fue entonces cuando decidió darle un escarmiento. La joven, de 18 años, contó esa experiencia a otras dos amigas, que conocen también a ese chico de la etapa del instituto. Entre las tres, presumen los Mossos, urdieron un plan. Una de las jóvenes contactó por las mismas redes sociales con ese antiguo amigo y le citó, con insinuaciones sexuales, en la parte alta de la riera del barrio de la Maurina, donde viven la mayoría de los protagonistas de esta historia. El joven –de carácter introvertido y fácil de convencer, afirman personas que le conocen– accedió a ese encuentro sin relacionar esa inesperada cita amorosa con el encontronazo que acababa de tener con la otra chica. Llegó puntual a la cita y la joven, acompañada por dos perros, le invitó a acompañarla al cauce de la riera para que los animales pasearan. Un plan perfecto para llevar a la víctima a una zona solitaria. En el cauce y sin testigos esperaban las otras dos chicas y dos jóvenes, tres años mayores que ellas, conocidos de esas adolescentes, con antecedentes por hechos violentos y que tenían asignado el papel de sicarios. Cuando el joven engatusado con la excusa del encuentro amoroso se percató del engaño era ya demasiado tarde.
Cuando llegaron al cauce de la riera, tras una corta disputa dialéctica, empezaron los golpes. Y la paliza fue brutal. Los dos sicarios (uno iba armado con una especie de puño americano) golpearon repetidas veces la cara de la víctima. Le fracturaron la mandíbula por diferentes partes y perdió varios dientes por los violentos puñetazos. Lesiones graves que requirieron una intervención urgente del herido en el hospital Val d’Hebron, al que fue trasladado.
La investigación de los Mossos, tras el interrogatorio de la víctima, se centró en sus inicios en los últimos pasos dados por ese joven en las redes sociales. “Y fue allí donde descubrimos la existencia de la conversación que la víctima había mantenido con una antigua compañera de instituto y también la cita de ese joven con otra amiga del mismo centro”, revela Joan Carles Escobar, jefe de la Comisaría de Mossos de Terrassa. Fue el primer hilo del que tiraron los investigadores para reconstruir la historia. Una investigación que les ha permitido cerrar el caso en un tiempo récord al identificar a las tres jóvenes que supuestamente urdieron el plan y a los dos hombres que presuntamente lo ejecutaron. El resultado de las pesquisas se ha traducido, en el caso de estos dos últimos jóvenes, “en una acusación por lesiones graves, uso de objetos contundentes, abuso de autoridad y engaño”, añade este intendente de Mossos. El juez ha enviado a prisión a los dos supuestos autores materiales de los golpes y ha decretado libertad con cargos para las tres jóvenes que los “contrataron” –se supone que a cambio de favores, no confesados– para ese trabajo.
Hicieron creer a la víctima que le esperaba una chica, pero se encontró con dos violentos ‘sicarios’