Las alfombras rojas marcan tendencia en peinados: afros, cortos y con reflejos
El bob pasa a un segundo plano y las famosas imponen cortes raros y destellos dorados
En la entrega de los Oscars impactaron, quizá más que los vestidos, la radicalidad de muchos cortes de pelo que lucieron las famosas invitadas a la noche más esperada de Los Ángeles. ¿El más comentado? El de Halle Berry. Desde que en el 2002 se convirtió en la primera mujer negra en ganar la estatuilla como protagonista (con Monster’s Ball, que le permitió un conmovedor discurso para dedicar su victoria “a todas las mujeres de color, sin nombre y sin cara, que por fin tendrán su oportunidad porque la puerta se ha abierto esta noche”), no había vuelto a abanderar tanto protagonismo. La actriz, que también en ese lejano 2002 llevó el vestido considerado aun hoy el más bonito de la historia de la alfombra roja por excelencia del cine, escogió el pasado domingo un peinado con mucha personalidad afro. Combativo. Una muestra de carácter.
Además de ser un guiño a todas esas mujeres de color a las que se refirió en su discurso, el peinado afro es pura tendencia. Lo llevan Solange Knowles (la hermana hipster de Beyoncé), Macy Gray, Redfoo, Bruno Mars... a veces Beyoncé, Rihanna y en su día Madonna y Cher. Este peinado fue noticia global en agosto cuando estudiantes del Pretoria High School Girls (en Sudáfrica), que en sus orígenes era una institución sólo para escolares blancas, denunciaron que sus profesores las obligaban a alisarse la melena por considerar que su pelo natural resultaba “desaseado e inapropiado”.
Pero más allá de mensajes implícitos, hoy es pura tendencia en una época en la que “se llevan los extremos. Si es un pelo rizado, debe serlo muchísimo. Si se opta por uno corto, debe ser cortísimo como Viola Davis o más incluso, y si se prefiere una melena, esta tiene que ser escaladísima”, según explica Víctor Toro, de los centros barceloneses Toro. Además, explica que ahora es también el momento de los flequillos. Pero, tal como advierte Alberto Cerdán (con centros en Madrid y Barcelona), no vale un flequillo cualquiera. “Tiene que ser un maxiflequillo. Comienza desde muy atrás y protagoniza el estilismo”.
Con todo este cambio, que comenzó a verse hace una semana en el Dolby Theatre y va camino de imponerse tras el verano, el gran perjudicado es el famoso corte bob. Justo con el que encandiló Enma Stone. “Ya está demasiado visto. Es el corte por excelencia desde hace tanto tiempo que está masificado hasta el aburrimiento”, explica Alberto Cerdán, el estilista catalán especializado en famosas. El caso es que el peinado Bob ahora “o se combina con un escalado muy potente, o con un maxi flequillo o se le da un toque de color”, añade Toro. Y lo mismo pasa con la melena larga: “La idea es que ya no se lleva el pelo sin intención, sino que se opta por una opción que le dé mucha vistosidad”.
Para eso, para que el corte escogido sea bien vistoso, “se sugiere optar por los tintes más tendencia del momento como los rosas, el blanco o los plateados”, explica Toro. En cuanto a los otros tonos que se llevan todo el protagonismo son los que Alberto Cerdán denomina “ojo de tigre”. Son dorados que incorporan todo tipo de matices (como la piedra entre pardo y amarillento compuesta por cuarzo, como componente principal, limonita y riebeckita) y que casan muy bien con otro elemento que se reincorpora a este nuevo capítulo de la moda capilar, la tiara. “No tiene que ser ni de reina ni de escolar, vale de todo tipo de materiales y formas, y además se adapta tanto a pelos largos como cortísimos y transforma el bob más aburrido en un peinado de actualidad”, apunta Cerdán.
Halle Berry y Viola Davis lo anunciaron en la entrega de los Oscars: vienen los afros y cortos muy cortos