Junqueras se erige como ‘pal de paller’ del independentismo
Los republicanos reúnen 5.000 personas en un mitin para reafirmar el referéndum
El líder de ERC, Oriol Junqueras, ofreció “diálogo bilateral” ayer al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, pero avisó que “nunca renunciará” al referéndum independentista e invitó a los comunes a sumarse a su proyecto.
La sensación fue la misma que habría percibido cualquiera durante un mitin de campaña electoral. Soplan vientos favorables para ERC –así lo indican todos los sondeos– y ayer realizaron un acto multitudinario en el Centre de Convencions Internacional de Barcelona (CCIB) para renovar su compromiso con el referéndum, pero también, y sobre todo, para erigirse en la nueva piedra angular del soberanismo, en substitución de la antigua CDC.
La arquitectura del referéndum recae en el presidente de ERC y vicepresidente del Govern, Oriol Junqueras. Y pese a la responsabilidad del encargo de Carles Puigdemont, desde esta posición los republicanos se sienten fuertes. “Ganaremos a la catalana, cívicamente y pacíficamente, pero también, si hace falta, insumisamente”. Así de vehemente se mostró el portavoz en el Congreso de los Diputados, Joan Tardà, para defender, si se da el caso, un referéndum unilateral. Una buena muestra de músculo y de que ERC quiere erigirse, desde su centralidad, en punta de lanza del independentismo.
Más señales: el acto en el CCIB surgió con la idea de convertirse en el “más multitudinario de la historia moderna” de ERC. Así lo aseguraba el comunicado enviado a su militancia hace unas semanas. Finalmente han congregado unas 5.000 personas, según los organizadores, para reafirmar su compromiso público con el referéndum y conjurarse. La cifra es la más alta de los últimos diez años de Esquerra. Con todo, los republicanos aprovecharon el acto de ayer para hacer varios llamamientos a los comunes para que se sumen al referéndum, aunque éste se convoque sin permiso del Estado. “Que se pongan del lado de la democracia de este país”, afirmó Junqueras, ya que “para ganar no nos sobra nadie”. Además, en una clara alusión a las confluencias de izquierdas que lideran Xavier Domènech y Ada Colau, clamó: “Nosotros sí que somos fraternales, por eso consideramos que las mejores relaciones se dan entre iguales”, es decir, entre Estado y Estado. En la línea de su presidente, Gabriel Rufián, diputado en el Congreso por ERC, avisó a los comunes que la de los independentistas es “la única amenaza a un statu quo injusto e indecente” y añadió que el referéndum “no pide que seas independentista, te pide que seas demócrata”.
Si los mensajes dirigidos a los comunes fueron implícitos, no fue así con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Junqueras, tras asegurar que el derecho a voto es muy importante, ha tendido la mano “para dialogar”, porque Catalunya “quiere las mejores relaciones bilaterales con todos los países del mundo, y obviamente con España. Le ofrecemos nuestra mano para dialogar bilateralmente; interprete los aplausos [de los asistentes en el CCIB] como una señal inequívoca de la sinceridad de nuestro ofrecimiento”. Además, avisó que “esta mano nunca renunciará a defender la democracia o a ejercer el derecho al voto, ni a las urnas ni a las papeletas”.
Por su parte, Tardà aseveró que convocar el referéndum es más importante que ganarlo, “porque un pueblo que ejerce el derecho a decidir nunca es pueblo vencido”. Tras calificar el 2017 como un año trascendental, y con las múltiples causas abiertas a cargos electos catalanes de trasfondo, destacó el compromiso de los republicanos “a las verdes y a las maduras con el Parlament y el Govern de Catalunya.
La secretaria general de ERC, Marta Rovira, intervino igualmente para afirmar que el Gobierno “tiene un vicio que consiste en obstaculizar la democracia, y quedarse anclado en el pasado”. Ahora mismo, está obsesionado en no dejarnos votar.
Al acto acudieron, entre otros, la presidenta del Parlament, Carme Forcadell; el presidente de la ANC, Jordi Sànchez, y el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart.