China modera el incremento de su gasto militar situándolo en un 7%
China anunció ayer que aumentará su presupuesto militar este año en torno a un 7%, lo que representa su nivel más bajo en dos décadas. Un nivel de incremento del gasto militar que se acomodaría así al ritmo de desaceleración económica que registra el gigante asiático y que se contrapone con la voluntad del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de alimentar el poder militar de su país con un alza del presupuesto de defensa en cerca de un 10%.
Fu Ying, la portavoz de la Asamblea Nacional Popular (Parlamento), desveló ayer el nivel de gasto que Pekín prevé desembolsar este año en una rueda de prensa en la que presentó los objetivos que centrarán este año la sesión anual del Legislativo que empieza hoy en la capital china.
Fu señaló que este año el presupuesto de defensa supondrá el 1,3% del PIB chino y ascenderá a algo más de un billón de yuanes (unos 132.000 millones de euros). Un dato aproximado que hoy debería precisar el primer ministro de la segunda potencia mundial, Li Keqiang, en su discurso ante los cerca de 3.000 legisladores.
Esta moderación del gasto militar supone una clara reducción, frente al 7,6% del año anterior, que ya fue el menor aumento desde el 2010, y sorprende ante los desafíos que afronta China en materia defensiva. Unos retos que incluyen, además de la modernización de sus fuerzas armadas, especialmente de su flota naval, la reducción de 300.000 efectivos de su Ejército de Tierra. La reforma ha provocado protestas de los afectados, que reclaman unas pensiones dignas.
Estas perspectivas de gasto se contraponen con la valoración hecha por el oficialista Global Times hace pocos días. El diario del Partido Comunista planteó la necesidad de que el presupuesto de defensa creciera al menos un 10% para poder afrontar la incertidumbre que despierta Trump.
Fu Ying minimizó esta amenaza y expresó su confianza en que Trump tome el camino de la cooperación. Advirtió, no obstante, que si bien con calma, Pekín responderá a todos los desafíos que EE.UU. le presente. Y rechazó que la fuerte inversión que realiza China en sus fuerzas armadas suponga una amenaza para la estabilidad internacional.
Tal afirmación, sin embargo, no tranquiliza a sus países vecinos, que observan como Pekín adopta una postura cada vez más firme en sus reclamaciones territoriales en el mar de China Meridional, así como en sus disputas con Japón y Taiwán.