China propone a EE.UU. y Corea del Norte un pacto que evite la colisión
Pekín pide a Pyongyang suspender sus pruebas y a Washington, las maniobras
China se erigió ayer como mediadora entre Corea del Norte y Estados Unidos y les propuso un compromiso para desactivar la espiral de tensión en que ha entrado esta zona del Pacífico. A Corea del Sur le pidió también que reflexione sobre la instalación del escudo antimisiles estadounidense Thaad en su territorio porque afectará a sus relaciones bilaterales, ya que Pekín considera que puede debilitar su sistema defensivo.
El ministro de Exteriores chino, Wang Yi, sugirió a Pyongyang y a Washington que den un paso atrás para evitar un choque frontal. En su única rueda de prensa anual, realizada en el marco de la sesión anual de la Asamblea Popular, propuso al régimen norcoreano suspender sus pruebas nucleares y lanzamientos de misiles balísticos, y a EE.UU. que deje de hacer maniobras aeronavales con Corea del Sur.
Wang planteó esta propuesta ante el temor de que la crisis desemboque en una intervención bélica. “Ambas partes son como dos trenes que aceleran el uno hacia el otro, sin que ninguno de los dos esté dispuesto a ceder”, dijo. “La pregunta es: ¿están realmente preparados para una colisión frontal?”, señaló el ministro. Añadió que la prioridad para China es “encender la luz roja y apretar el freno en los dos trenes”.
En su papel de mediador, el político chino no ahorró críticas a las dos partes. Condenó el lanzamiento de los cuatro misiles que realizó Pyongyang el lunes, ignorando la resoluciones de la ONU, y criticó los ejercicios militares de EE.UU. y Corea del Sur, porque en su opinión añaden presión al régimen norcoreano. “Las armas nucleares no dan seguridad”, dijo, para añadir que “el uso de la fuerza no llevará a la solución”.
Wang cree, sin embargo, que la aceptación de su propuesta abriría la puerta a negociar un mecanismo de paz que permitiera desnuclearizar la península coreana. Unas conversaciones que Corea del Norte interrumpió en el 2009, cuando anunció que reanudaba su programa de enriquecimiento nuclear para aumentar su fuerza de disuasión nuclear. Desde entonces la región ha registrado crisis periódicas provocadas por Pyongyang al llevar a cabo pruebas nucleares y lanzamiento de misiles balísticos.
La propuesta de Wang, sin embargo, no es nueva. Pyongyang ya la planteó en enero del 2015, a cambio de que EE.UU. anulara sus maniobras con Corea del Sur, pero entonces ni Washington ni Seúl aceptaron la iniciativa.
Un plan que tampoco parece fácil que sea aceptado ahora. La firme condena del Consejo de Seguridad de la ONU al lanzamiento de misiles ha irritado a Pyongyang y EE.UU., que a través de su embajadora ante la ONU, Nikki Haley, dijo que Washington está revaluando su política hacia Corea del Norte. “No descartamos nada y estamos considerando
Estados Unidos dice que revalúa su política hacia Kim Jong Un, pero que excluye la vía del diálogo
todas las opciones”, añadió Haley, quien precisó que la vía del diálogo estaba descartada porque Kim Jong Un no es una persona racional y muestra una “arrogancia increíblemente irresponsable”.
Pero con la misma fuerza que defendió su iniciativa para desactivar la actual crisis, Wang advirtió a Seúl de las consecuencias que tendrá la implantación del escudo antimisiles Thaad, que EE.UU. empezó a instalar a principios de semana, y que considera que afectará al sistema defensivo de China. “No es así como deberían comportarse los vecinos y esto podría afectar a la seguridad de Corea del Sur”, advirtió el ministro.
La realidad es que llueve sobre mojado, ya que las relaciones entre Pekín y Seúl se han degradado desde que Corea del Sur cerró el acuerdo con EE.UU. para instalar el sistema Thaad en su territorio, en julio del 2016. Desde entonces ambos países se han enzarzado en unas represalias que han desembocado en una crisis de baja intensidad, provocada por el boicot del Gobierno chino a las agencias de viajes surcoreanas y la cadena de tiendas que el grupo Lotte tiene en Pekín. Acciones a las que Seúl ha respondido rechazando la renovación de visados de trabajo a los profesores del instituto Confucio.