Un aliado para las constituciones
La Comisión Venecia es un órgano consultivo y sus decisiones no son vinculantes
La Comisión Europea para la Democracia a través del Derecho, más conocida por el nombre de la Comisión de Venecia porque es en esa ciudad italiana donde se encuentra, es un órgano asesor del Consejo de Europa sobre cuestiones constitucionales. Es decir, sus decisiones, valoraciones, dictámenes e informes no son vinculantes.
Y su principal función es la de prestar asesoramiento para la preparación de las constituciones, enmiendas constitucionales y legislación paraconstitucional, así como la legislación sobre las minorías o legislación electoral.
Este órgano fue creado en 1990 como un acuerdo entre los 18 miembros del Consejo de Europa y a partir del año 2002 comenzó a permitir que estados no europeos se convirtieran en miembros. Desde su creación, la comisión ha buscado, ante todo, complicidad con los órganos constitucionales o equivalentes en los estados a la hora de desarrollar su labor de asesoramiento y consejo.
A petición de un tribunal constitucional (o de un órgano equivalente), la Comisión de Venecia puede dar una opinión amicus curiae (de expertos) sobre aspectos del derecho comparado o del derecho internacional en relación a los asuntos pendientes en el tribunal en cuestión. Así lo cuenta el propio organismo en sus comunicados públicos dirigidos a otras instituciones legales del mundo. La comisión no dará respuesta en cuanto a la constitucionalidad de la ley nacional impugnada, sino que limita su opinión a las cuestiones de derecho comparado y derecho internacional. Lo que debe tenerse en cuenta sobre la valoración realizada ahora respecto al Tribunal Constitucional español. Llegado el caso, estas opiniones pueden ser proporcionadas en un plazo muy rápido, al menos en forma preliminar.
La Comisión de Venecia está compuesta por expertos independientes nombrados por cuatro años por los Estados miembros y se reúne cuatro veces al año en Venecia en sesión plenaria para aprobar sus dictámenes y estudios y para promover el intercambio de información sobre evoluciones constitucionales.
Este organismo defiende que su colaboración con los tribunales constitucionales puede contribuir a fortalecer los principios fundamentales del Consejo de Europa, que son la democracia, la protección de los derechos humanos y el Estado de derecho. Las decisiones de los tribunales, anulando leyes o decretos, son, a veces, criticadas por los otros poderes del Estado. Estas críticas pueden ser aceptables si están asociadas al respeto de sus decisiones. Desgraciadamente, esto no sucede en todos los casos.
La comisión apoya a los tribunales constitucionales que soportan presiones de otros poderes del Estado, o cuando sus decisiones no se llevan a la practica, llegado el caso, organizando seminarios internacionales sobre las cuestiones litigiosas o formulando declaraciones.
La comisión proporciona regularmente información sobre la jurisprudencia más importante de unos 80 tribunales constitucionales y órganos equivalentes de Europa, Asia, África y de América, también del Tribunal Europeo de Derechos Humanos y del Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas. En su registro existen más de 5.000 decisiones adoptadas por el organismo consultivo.
La comisión difunde su labor de ayuda para evitar que otros “poderes del Estado” dañen las cartas magnas