V de ‘vendetta’
“No se puede ir a un restaurante de 100 euros con 10 euros”. Esa fue la frase de Antonio Conte, actual entrenador del Chelsea, cuando se marchó del Juventus en referencia a que el conjunto piamontés no tenía la suficiente categoría y el suficiente poderío económico como para extrapolar a Europa su aplastante dominio en Italia. Sin embargo, su sustituto, Massimiliano Allegri, ha mantenido la autoridad del equipo turinés en el calcio a la par que le llevaba en la Champions a cotas más acordes con la historia del club, ya que con el exseleccionador italiano nunca pasaron de cuartos de final. “Con Conte, la Juve tenía miedo en los partidos europeos y con Allegri ha perdido ese miedo”, recuerda para este diario Paolo Condò, experto comentarista de Sky Sports Italia, que añade: “En el Juventus todo el mundo quería al Barcelona porque consideran que es el examen final para convencerse de que pueden ganar la Champions”.
Levantar la Copa de Europa sería la consagración para Allegri, que conquistó una liga italiana con el Milan y ahora ya suma dos con el conjunto bianconero. Considerado un seductor en su vida privada, al técnico le falta dar el salto en Europa para comenzar a ser considerado un gran entrenador, para intentar acercarse a los gigantes transalpinos de los banquillos, como Carlo Ancelotti, Marcello Lippi, Fabio Capello o Arrigo Sacchi. Eso todavía son palabras mayores para Allegri, que condujo al Juventus a la final de Berlín en el 2015 y que la pasada campaña estuvo muy cerca de dejar en la cuneta al Bayern, con el que solamente cayó en la prórroga.
Si algún equipo es la bestia negra del entrenador del Juventus ese es el Barcelona. El conjunto blaugrana eliminó a su Milan en dos cruces y batió a su Juve en la referida final del 2015. Allegri siempre le ha puesto en bastantes dificultades, especialmente cuando ha actuado como local, pero a la hora de la verdad no ha sabido dar con la tecla definitiva. Por eso en cierta medida esta eliminatoria también es una revancha personal para el entrenador, que quiere escribirla con V de vendetta.
Conte dijo que no se puede ir a un restaurante de 100 euros con 10, pero Allegri ha eliminado miedos