El Palau estalla: Gatti, Mehta, Lupu, Terfel y John Adams de compositor invitado
La temporada 2017-2018 concentra a grandes tenores: Kaufmann, Flórez y Beczala
Mehta, Gatti, Gardiner, Christie, Savall, Herreweghe, Heras-Casado, Rattle, Sokolov, Lupu, Leonskaja, Buniatishvili, Mutter, Kavakos, Faust, Terfel, Kaufmann, Damrau, Jaroussky, Goerne, Beczala, Padmore, Flórez, Von Otter, Peretyatko... y John Adams de compositor invitado. El Palau sigue yendo de esta guisa: de lo más lo mejor y en altas dosis. Y con 2,6 millones de euros de presupuesto. Barcelona está de suerte. 113 conciertos ha atado la dirección de la casa mientras su presidenta, Mariona Carulla, se preparaba para declarar en el juicio por el expolio del Palau. Para declarar que no sabía nada de lo que hacía Fèlix Millet en su etapa de vicepresidenta. “Queríamos que el juicio pasase cuanto antes”, dijo ayer en la presentación de la temporada 201718. “El Palau –añadió– sigue centrado en la actividad artística”.
La llegada de Simon Halsey como director de los coros y asesor artístico del Palau ha supuesto una bocanada de aire fresco para los
cantaires y un chute extra de ilusión para los programadores de la casa, que el próximo curso lucen en muchos frentes y apuestan por un repertorio sorpresivo en el que Beethoven es –por fin– una rareza.
Joan Oller y Víctor Garcia de Gomar, director general y artístico respectivamente, sacan pecho, por ejemplo, en el capítulo de grandes orquestas. Si este curso se lo habían jugado todo –y bien jugado– a las
nueve sinfonías de Dudamel, ahora contraatacan con toda una London Symphony dirigida por John Eliot Gardiner (en Les nuits d’été de Berlioz); con la Filarmónica de Munich en manos de Pablo Heras-Casado y Javier Perianes de solista (han grabado el tercer concierto para piano de Bartók); con todo un Giardino Armonico de Giovanni Antonini arropando a Isabelle Faust (en los conciertos para violín de Mozart); con Les Arts Florissants y William
Christie (en La creación de Haydn); con Zubin Mehta y su Maggio Musicale Fiorentino (que aparte de La
consagración de la primavera de Stravinski harán escenas corales de Wagner con el Orfeó Català) o, en fin, con Daniele Gatti y la Mahler Chamber, que cerrarán aquí su gira con el Orfeó y la 9.ª de Beethoven.
Y a ello hay que sumar la colaboración del Palau con dos conciertos de BCN Clàssics que se pueden incluir en abono: la Sinfónica de Bammar.
berg y la Filarmónica de Berlín. Por cierto, Simon Rattle, que podrá hacer suyo el Palau gracias a su colega Simon Halsey, se teloneará a sí mismo con un concierto a capela, el primero de su carrera. Será con los coros de la casa antes de su despedida como titular del ferrari berlinés. Las voces son definitivamente el
pal de paller del Palau. En lo coral y en lo operístico, con permiso del Liceu. “La voz es vehicular en nuestro proyecto”, defendió Garcia de Go- Así, Jonas Kaufmann regresa junto a Diana Damrau para repasar el cancionero italiano de Hugo Wolf; viene el barítono Bryn Terfel, que no pasaba por Barcelona desde 1991, con dos escenas mayúsculas de la ópera como son la Despedida
de Wotan yla Muerte de Boris. Viene la gran Anne Sophie von Otter, que cantará acompañada al fortepiano por Kristian Bezuindehout. Regresan Padmore, Beczala y Flórez, e irrumpe la espectacular soprano Olga Peretyatko, con arias de ópera. Sin olvidar la presencia de Matthias Goerne con la Freiburger Barockorchester y Bach, o la de Philippe Jaroussky en un Orfeo ed Euridice junto al Cor de Cambra del Palau.
Los coros comienzan a dar la talla. Halsey desgranó en un notable catalán la actividad que les espera, comenzando por el estreno europeo de Considering Matthew Shepard,
Rattle se teloneará a sí mismo dirigiendo los coros de la casa a capela antes de actuar con la Filarmónica de Berlín
de Craig Hella Johnson (una moderna revisión de la Pasión ),oel encargo de Rattle y Halsey a Jonathan Dove sobre la crisis de los refugiados (en coproducción con el Grec), así como las obras que interpretarán de John Adams, que será compositor invitado en su 70.º aniversario. Un nombramiento que compartirá con Albert Guinovart.
Y decir, en fin, que vuelve Radu Lupu, que Savall dirigirá su primer
Mesías por Navidad, y que el Palau emulará aquel célebre proyecto de los 60 en que Perlman, Zukerman, Du Pré, Mehta y Barenboim se unieron en el quinteto de La Trucha de Schubert: los virtuosos serán Isabelle y Boris Faust, Queyras, Durantel y Melnikov. ¡Pourquoi pas!