Rajoy da por hecho el apoyo del PNV a los presupuestos tras el pacto con Cs
El presidente llama a la responsabilidad de todos los partidos, no sólo del PP
El Gobierno está seguro de tener la aprobación de los presupuestos al alcance de la mano. Mariano Rajoy dio por hecho ayer el apoyo del PNV a las cuentas del Estado, lo que le permitiría que los presupuestos puedan debatirse en el Congreso.
Hace apenas dos meses nadie en el PP daba nada por los presupuestos del 2017, tras la confirmación de la gestora del PSOE de que no facilitaría su aprobación, y ya todos pensaban en el siguiente paso, el de aprobar los del 2018, una vez que el PSOE tenga una nueva dirección tras su congreso federal. Pero ahora todo parece distinto y, tras el acuerdo con Ciudadanos el miércoles por la noche, que suma 32 votos a los 137 suyos, más el voto de Coalición Canaria, que hacen 170, al PP sólo le faltaban cinco escaños, los mismos que tiene el PNV, para alcanzar los 175 que le permitirán que no prosperen las enmiendas de la oposición que pedirán la devolución del proyecto al Gobierno. Los nacionalistas vascos no han anunciado todavía el apoyo a las cuentas, aunque han reconocido las negociaciones, incluso entre Rajoy y el presidente del PNV, y han admitido que el diálogo avanza.
Rajoy no obstante lo da por hecho. Durante la clausura del congreso del PP de Castilla y León, el presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, explicó el contenido de los presupuestos aprobados antes de ayer por el Consejo de Ministros y advirtió que no está todo hecho: “Necesitamos 175 votos para que no prosperen las enmiendas de totalidad y 176 para aprobar los presupuestos”. Bromeó con los que ya tiene el PP. “Hay diferentes opiniones”, indicó tras recordar el acuerdo con Ciudadanos, pero acabó dando una cifra: “Yo creo que tenemos 175,5 votos”.
Eso quiere decir que aparte de los acuerdos cerrados con los liberales y Coalición Canaria ya suma los cinco del PNV, y el medio del 175,5 podría referirse al diputado de Nueva Canaria Pedro Quevedo, que prefiere no ayudar al PP en la votación de las enmiendas de totalidad, pero sí votar a favor de los presupuestos una vez que se admitan a trámite.
Para lograr ese medio voto final que le falta a Rajoy, el presidente del Gobierno llamó a la responsabilidad, la primera la del PP, pero también, y a su juicio, de los demás partidos, “que también se examinan ante los ciudadanos y tienen parte de la responsabilidad”. Rajoy, para conseguirlo, asegura estar dispuesto a “dialogar, pactar y actuar con responsabilidad”, convencido de que “esta es una legislatura distinta,
Rajoy alerta contra los extremistas de derecha, izquierda y “de la nada” que prometen arreglar todo en 15 minutos
en la que nadie tiene mayoría”.
Rajoy subrayó la importancia de que se aprueben los presupuestos para cumplir con los compromisos europeos, pero para también dar idea de estabilidad política en una Europa en convulsión tras el Brexit, al que también se refirió Rajoy , producto, dijo “de lo que prolifera por Europa”, que describió como “toda suerte de partidos de extrema derecha, extrema izquierda y extrema nada que dicen que lo van a arreglar todo en un cuarto de hora”.
Pero no es así, subrayó Rajoy, refiriéndose también a España. Por eso considera que “ahora toca mucha moderación, sentido común y solvencia”.
Rajoy clausuró el congreso que el PP de Castilla y León celebró en Valladolid, que supone la sustitución del presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, por el alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, que también presidía el comité de Derechos y Garantías de la dirección nacional del PP, donde tuvo que lidiar con numerosos casos de corrupción y suspender de militancia a destacados dirigentes del PP. Rajoy no se olvidó de despedir a Juan Vicente Herrera, que apoyó a otro candidato frente a Mañueco, propuesto por la dirección. Le agradeció haberle tenido al lado en los momentos difíciles y subrayó que deja la presidencia del PP porque él quiere. “Estamos todos juntos”, dijo Rajoy.