El Gobierno, la Generalitat y el Ayuntamiento se alían por la Agencia del Medicamento
Las tres administraciones se conjuran para lograr que Barcelona acoja el organismo europeo que saldrá de Londres a raíz del Brexit candidatura debe elaborarse con rapidez, ya que Rajoy tiene previsto defenderla en Bruselas en junio.
La ministra Dolors Montserrat, el conseller Toni Comín y la alcaldesa Ada Colau se reunieron ayer para aunar esfuerzos y conseguir que Barcelona sea la sede de la Agencia Europea del Medicamento, que deberá salir de Londres a raíz del Brexit. La
El Gobierno español y la Generalitat, con el acompañamiento del Ayuntamiento de Barcelona y el aliento del empresariado y los sectores a la ciencia y la investigación en Catalunya, han hecho abstracción de las malas relaciones motivadas por el proceso soberanista para unirse en un objetivo –al menos uno– común, y para hacerlo con convicción y sin demora. Apenas cinco días después de que se iniciara el proceso formal de negociaciones para la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea (UE), el pasado día 29 de marzo, el Ayuntamiento, la Generalitat y el Estado constituyeron ayer un grupo de trabajo que ha de impulsar la candidatura de Barcelona a albergar la sede de la Agencia Europea del Medicamento, uno de los organismos comunitarios que tendrán que hacer las maletas y mudarse al continente como consecuencia del Brexit.
La creación de este grupo de trabajo –salvando las distancias temporales y temáticas sería el equivalente al que se constituyó en los años ochenta para preparar la candidatura barcelonesa a los Juegos Olímpicos de 1992– refuerza la alianza de las tres administraciones en la misión de captar para la capital catalana la Agencia Europea del Medicamento. Ayuntamiento, Generalitat y Estado han visto en el Brexit la oportunidad de que Barcelona consiga finalmente un premio gordo al que optó precisamente en aquel periodo olímpico. En aquella ocasión, la ciudad ya presentó su candidatura. Le avalaba, entre otras cosas, la tradición de la industria farmacéutica, pero Londres fue la elegida.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; la ministra de Sanidad, la catalana Dolors Montserrat, y el conseller de Salut, Toni Comín, se reunieron ayer para decidir la creación del grupo de trabajo y dar el pistoletazo de salida de la que es una carrera de velocidad, Y es que la decisión sobre que ciudad tomará el relevo de Londres será rápida. Se impone el
hard Brexit y hay que trabajar contra reloj –aunque ya hay un trabajo previo hecho– para confeccionar una candidatura exprés. La sede de la Agencia Europea del Medicamento podría conocerse muy pronto. Las diversas fuentes consultadas por La Vanguardia tienen marcadas en el calendario las fechas del 22 y el 23 de junio. Esos días se celebrará en Bruselas una reunión del Consejo Europeo, y en ese encuentro el presidente español, Mariano Rajoy, será el encargado de defender la candidatura de Barcelona ante sus colegas europeos. Lo hará con el refuerzo que le otorga el aval de tres administraciones públicas enfrentadas por muchas cosas pero que, en esta aventura, han decidido hacer piña en torno a Barcelona, convencidas de que esta es una candidatura ganadora.
El complicado juego de las relaciones diplomáticas en el tablero europeo impide asegurar hoy si la suerte sonreirá esta vez a Barcelona, que a la derrota de 1995 frente a Londres –las crónicas de la época dicen que por la mínima– sumó otra más sorprendente: en el 2002 la UE acordó que la sede de la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria estaría en la ciudad italiana de Parma. En aquella ocasión, desde Catalunya llovieron críticas hacia la figura del en- tonces presidente del Gobierno español, Jose María Aznar, al que se acusó de haber puesto poco énfasis en la defensa de las intereses de Barcelona. En esta ocasión, en cambio, el Gobierno se ha puesto las pilas desde el primer momento. Ya el pasado 22 de julio del 2016, el Gobierno español, después del Consejo de Ministros, se comprometió a trabajar coordinadamente para que Barcelona pueda ser la sede de la Agencia. Aquel día Mariano Rajoy anunció su apoyo total y absoluto a la candidatura catalana.
La idea es que el contenido de la candidatura de Barcelona, la definición de todo aquello que la ciudad puede y está dispuesta a ofrecer, esté listo en dos o tres semanas. La competencia, como a mediados de los noventa, será dura. No en vano, son varias las ciudades que han mostrado interés en por acoger a la Agencia Europea del Medicamento cuando marche de Londres. Entre ellas figuran Milán, Amsterdam Zagreb, París y Lyon.
El objetivo de las autoridades europeas es que la mudanza de la agencia comience como muy tarde dentro de un año. Por tanto, Barcelona, como las otras precandidatas, tendrá que contar ya a mediados del 2018 con un espacio físico donde ubicar las dependencias del organismo comunitario, un espacio de una superficie y unas condiciones similares a las de Londres. La instalación de la agencia en Barcelona requeriría una importante inversión inmobiliaria en un edificio ya existente porque no habría tiempo de construir uno de nueva planta. La ac-
DECISIÓN INMINENTE El Consejo Europeo de junio podría decidir ya qué ciudad reemplaza a Londres
LA UBICACIÓN Se busca un edificio ya construido y en el que trabajarán unas 900 personas
tual sede londinense fue inaugurada en agosto del 2014, dimensionada a las necesidades actuales y futuras de una entidad que se encarga de evaluar las solicitudes de autorización de comercialización de medicamentos para uso humano y veterinario y de su supervisión. A lo largo de su historia, la agencia ha evaluado casi un millón de medicamentos.
La agencia ocupa en la capital británica una superficie total de 23.500 metros cuadrados con seis plantas dedicadas a oficinas, dos plantas con salones y salas de conferencias y otras instalaciones, incluidas placas fotovoltaicas para el suministro de energía. En el cuartel general londinense trabajan 890 personas. Según una primera prospectiva hecha por el Ayuntamiento, para muchas de estas personas, puestas a abandonar la capital británica, Barcelona es una de las mejores opciones. El Ayuntamiento, a través de su teniente de alcalde de Promoción Económica, Jaume Collboni, desde el primer momento, puso el foco en la Agencia del Medicamento como objetivo número uno de su plan Brexit de atracción de empresas y organismos radicadas en el Reino Unido.
Uno de los puntos fuertes de la candidatura de Barcelona es la condición de Catalunya como potencia de la producción farmacéutica europea. En la ciudad están ubicados más de 250 laboratorios responsables de casi la mitad de todo el sector en España. La industria farmacéutica contribuye con un 6% al PIB catalán y genera unos ingresos anuales que superan los 11.500 millones de euros. En su conjunto, el sector bio y farmacéutico catalán es el quinto más productivo de la Unión Europa, con un peso asimilable al que tienen estados como los Países Bajos, Dinamarca o Suecia. La biorregión de Barcelona concentra también grandes infraestructuras científicas, como el Sincrotón Alba, el Barcelona Supercomputing Center o el Centro Nacional de Análisis Genómico.
El aterrizaje en Barcelona de la Agencia Europea del Medicamento tendría también un impacto importante en otros sectores económicos. Se calcula que los expertos y profesionales que se desplazan a Londres para despachar con la agencia ocupan durante los días laborables unas 350 habitaciones, que a lo largo del año representan casi 90.000 pernoctaciones hoteleras.