Críticas a Mónica Oltra por insinuar que el Gobierno favorece a Catalunya
Las declaraciones de la vicepresidenta de la Generalitat valenciana y líder de Compromís, Mónica Oltra, en que afirmaba que “el Gobierno de España sólo atiende a aquellos que hacen más ruido” y que “quien más grande monta el pollo se le tapa la boca con inversiones”, provocaron ayer un aluvión de críticas por parte de los principales partidos políticos catalanes, que interpretaron las palabras de la vicepresidenta como una ataque a la promesa del Gobierno español de invertir 4.200 millones en infraestructuras en Catalunya.
El secretario de organización del PSC, Salvador Illa, aseguró sobre las palabras de Oltra que “no hay argumentos para decir eso” ya que, a su modo de ver, la inversión en Catalunya “obedece a las necesidades objetivas” de una comunidad con la quinta parte de la población y del PIB de España que necesita buenas infraestructuras para ser motor de la economía española.
Por su parte, el portavoz adjunto de ERC en el Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián, reprochó a la vicepresidenta valenciana su “enorme miopía social y política” y le acusó de asumir un discurso “muy parecido” al de la presidenta de la Junta de Andalucía y actual candidata a la secretaría general del PSOE, Susana Díaz. El portavoz del partido independentista insistió en que “no es hacerla gorda sino pedir lo que corresponde en un momento determinado” y añadió que, pese a su “buena relación” con los partidos líderes de la “nueva política”, sus discursos “suenan bien hasta que hablan de Catalunya”.
La coordinadora general del PDECat, Marta Pascal, también quiso destacar las supuestas coincidencias del discurso de Oltra con el de la líder andaluza: “Hay menos distancia entre Susana Díaz y Mónica Oltra de la que pensaba”. Pascal subrayó que en la política valenciana “algunos piensan que el proceso catalán va de lloriquear o tapar algo”, y que, según su criterio, “no han entendido absolutamente nada”. La coordinadora del PDECat aseguró además que su partido “está convencido” de que las inversiones se tienen que hacer y sentenció que no se dejarán “intimidar” por las acusaciones “de ningún líder político”.
Tras las críticas recibidas, la vicepresidenta de la Comunidad Valenciana aclaró ayer mismo en su cuenta de Twitter el significado de sus declaraciones, afirmando que su “grito” iba dirigido “hacia el Gobierno central” y que “ninguna autonomía roba nada a nadie, pero nosotros no tenemos lo que nos corresponde”.