Unas cuentas cimentadas en una recaudación tributaria optimista
El proyecto de nuevos presupuestos para el 2017 viene marcado por un gasto contenido y una previsión de ingresos bastante optimista. Desde el Gobierno defendieron ayer que dichas estimaciones se corresponden con un ritmo de crecimiento superior al consignado en el cuadro macroeconómico –sigue en un 2,5% del PIB, cifra que las proyecciones del Banco de España ha superado en tres décimas– y el impacto positivo de la inflación.
Los ingresos se fundamentan en una subida estimada de la recaudación tributaria del 7,9% (cuando en el 2016, aumentaron sólo un 2,3%, muy por debajo de la previsión), hasta alcanzar el nivel de 200.000 millones registrado antes del estallido de la crisis. El ministro Cristóbal Montoro afirmó ayer que este aumento se deberá a la ampliación de las bases imponibles (5,5%) e hizo referencia a la mejora de los salarios vía negociación colectiva. Calculan que las rentas de los hogares aumentarán un 4,6%, mientras cuentan con que el efecto de la rebaja del IRPF pierda fuerza. Todo para explicar un aumento del 7,7% de la recaudación del IRPF y del 7,3% en el IVA. A lo que hay que sumar la subida del 12,6% en el impuesto de sociedades.
¿Cómo han afectado al impuesto de sociedades los cambios a la grandes compañías aprobados a finales de año? Para dar idea del impacto, el detalle sobre los beneficios fiscales en dicho impuesto supone reducirlos casi a la mitad (-44%) con respecto al ejercicio anterior: de 3.840 millones de euros a 2.127 millones. El objetivo es lograr casi 24.400 millones de euros.
Las cuentas que iniciaron ayer su recorrido por el Parlamento recogen también un incremento anual de las cotizaciones a la Seguridad Social de empresarios y trabajadores del 6,9%. Una subida similar a la fijada en los presupuestos del 2016 y muy por debajo de lo registrado al final del ejercicio (creció apenas un 1%). Montoro trató de justificar estos cálculos argumentando que está en línea con el ritmo de crecimiento registrado en las arcas de la Seguridad Social en los dos primeros meses del año.