El Dakar se endurece con las dunas de Perú y 2 días más
El Dakar 2018, que supondrá la 40.º edición del mítico rally (contando la suspendida del 2008), volverá a los desiertos de Perú, después de cinco años de ausencia. Será la principal novedad de la carrera más dura del mundo, que además prolongará su recorrido con dos etapas más, 14 en total, y se moverá ligeramente en el calendario al retrasar la salida al día de Reyes, el 6 de enero, hasta el 20. La meta esta vez será en Córdoba (Argentina), por primera vez en las 10 ediciones sudamericanas del rally.
La familia del Dakar se volvió a reunir ayer, en el hotel Miramar de Barcelona, tres meses después de la última edición, para conocer el nuevo capítulo que se ha preparado para el 2018 de la voz de Marc Coma, el director de carrera. “Esta próxima edición va a salir un poco más tarde, el 6 de enero desde Lima (Perú). Encontraremos dos etapas en bucle, en Pisco y en San Juan de Marcona, en la primera semana. De Lima a La Paz –día de descanso–, la primera semana, el 80% del recorrido será de dunas y fuera pista, y con pocos kilómetros de enlace. Os esperan cinco primeros días duros, pero es lo que todos buscáis”, decía Coma, que ha estado hace dos semanas en Perú reconociendo el territorio para diseñar el recorrido –no desvelado–.
Aun así, los pilotos y equipos presentes en Miramar pudieron hacerse una idea de lo que les espera, a tenor de las imágenes grabadas por Coma y sus ayudantes: las vistas del desierto de Perú son espectaculares, con cordones de dunas interminables, hasta perderse la vista. Dakar africano en estado puro, navegación por el desierto, huir de las pistas rápidas, lo que siempre habían demandado los dakarianos veteranos. Como Gerard Farrés, el piloto de Manlleu, tercero en motos este año. “Agradezco a Marc Coma que haya hecho volver la carrera a lo que nos gustaba, la navegación. Lo hemos disfrutado y lo hemos sufrido, ojalá que volvamos a este espíritu con la arena de Perú”, decía Farreti ,un especialista en la navegación
La jornada de descanso volverá a ser en La Paz. La carrera seguirá dirección sur hacia el altiplano boliviano, en altura, y se adentrará en las pistas rápidas de Argentina, con final en Córdoba. “Acabaremos con un pequeño homenaje a la capital del motor en Argentina. El último día será una etapa bucle en Córdoba”, explicaba Coma, con la convicción de que el perfil del Dakar 2018 se acerca cada vez más a la imagen de su rally ideal de aventura, autenticidad y navegación.