Un atentado en Dortmund convulsiona la Champions
Tres bombas potentes contra el autocar del equipo obligan a suspender el partido El jugador Marc Bartra sufre heridas leves por la rotura de cristales
El Borussia Dortmund-Mónaco que se tenía que haber jugado anoche en el Iduna Signal Park fue suspendido y se jugará a las 18.45 h de hoy en el mismo escenario después de que tres potentes explosivos colocados en la carretera alcanzaran al autobús del equipo alemán a los cien metros de salir del hotel de concentración, cuando se dirigía a su estadio. Uno de los explosivos hizo añicos uno de los cristales traseros del vehículo y provocó cortes en el brazo y la mano de Marc Bartra, el central del equipo de Tuchel de pasado blaugrana. El jugador fue llevado al hospital más cercano para que se le practicaran las primeras curas. Aunque en un principio parecía que los cortes eran superficiales, una posterior inspección descubrió que tenía la muñeca rota y cristales incrustados en la mano derecha, por lo que fue operado de urgencia.
En la rueda de prensa que empezó pasadas las once de la noche, el jefe de la policía de Dortmund informó de un cuarto artefacto que no llegó a explotar y que fue encontrado en las cercanías del hotel de concentración.
El suceso provocó una gran conmoción en Alemania. Desde un principio se temió que se tratase de un ataque terrorista. Berlín sufrió uno que provocó once muertos en uno de los populares mercadillos navideños el pasado 19 de diciembre. A la hora de escribir estas líneas la policía investigaba todas las hipótesis, no quería hablar de un atentado, pero no descartaba nada. Según portavoces de la policía, se trataba de “serios artefactos explosivos”, por lo que podía descartarse que se tratase de una simple gamberrada de los hinchas locales. Según un comunicado de la policía de Dortmund, “el incidente se produjo poco después de las siete de la tarde y las explosiones provocaron que las ruedas del autobús estallaran en parte. Todavía no se puede determinar con exactitud qué lo ha provocado”. Horas más tarde, la fiscalía de Dortmund confirmó el hallazgo de una carta en las proximidades de la escena del ataque y estaba revisando su autenticidad.
Las noticias llegaron de forma instantánea al estadio, donde acababan de abrir las puertas y el público comenzaba a poblar las gradas. La UEFA reunió al instante un gabinete de crisis y se reunió con representantes de los dos equipos. En torno a las 20.30 se llegó a la decisión de aplazar el partido hasta hoy, sobre todo porque los jugadores del equipo alemán no estaban en condiciones anímicas de poder jugar.
Las reacciones de condena de la explosión y de solidaridad con el Borussia llegaron de todas partes, entre ellas un tuit del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, así como otro del Consejo Superior de Deportes (CSD).
Los aficionados del Mónaco presentes en la grada reaccionaron a la suspensión con gritos de “Borussia, Borussia”. La respuesta de la afición alemana llegó a través de las redes sociales, ofreciendo alojamiento a los hinchas del principado para que pudiesen quedarse 24 horas más en Alemania y asistir hoy al partido.
La UEFA señaló que “en ningún momento hubo peligro en el interior ni en las proximidades del estadio”. La policía aseguró que para esta tarde prepara un dispositivo de seguridad excepcional para garantizar que el partido se dispute con normalidad.Esta noche se juega otro encuentro de los cuartos de final en Alemania, el Bayern-Real Madrid en Munich.
Se da la circunstancia de que el último partido aplazado en la Champions también afectó a un Borussia, pero al otro, al de Mönchengladbach, Se trató del Manchester City-Borussia Mönchengaldbach de septiembre, que no pudo jugarse por las fuertes lluvias caídas en Manchester, que dejaron el campo impracticable. El partido se jugó al día siguiente.
OPERADO DE URGENCIA El exblaugrana fue operado anoche de la rotura de la muñeca derecha y de esquirlas en la mano TERRORISMO La policia alemana manejaba la hipótesis del uso de “serios artefactos explosivos” SOLIDARIDAD Los aficionados del Dortmund ofrecieron sus casas a los del Mónaco desplazados a Alemania