La Vanguardia

Cadena de escándalos

- ADOLFO S. RUIZ Sevilla

El canal 2M indigna a la conservado­ra

sociedad marroquí por un documental de

amor y sexo El programa, con un lenguaje crudo, era obra del cineasta Nabil Ayuoch, autor de ‘Much love’

Una cadena de televisión de corte liberal puede subsistir en un país tan conservado­r en temas de moral y costumbres como Marruecos? Puede, pero a costa de grandes escándalos, si bien algunos de ellos con ciertas sospechas de invención o maquinació­n. Es el caso de la cadena 2M, que enlaza un incidente tras otro, pese a lo cual es la de mayor audiencia en el país.

El último escándalo es la difusión, hace un par de semanas, de un documental en el que varios jóvenes marroquíes se expresaban libremente acerca de cómo veían el amor y las relaciones sexuales en su país. Además del tema, que la mayor parte de los marroquíes considera que no debe tratarse en una televisión concebida, en su opinión, para ser consumida en familia, llamó la atención el lenguaje utilizado, en ocasiones demasiado crudo y vulgar para los televident­es críticos. Y que ello se haga en una televisión pública, sufragada por todos los marroquíes, se ha traducido en un aluvión de descontent­o en las redes sociales.

Más aún cuando algún medio de comunicaci­ón ha llamado la atención sobre el hecho, que pasó inadvertid­o al principio, de que el autor del documental es el cineasta Nabil Ayuoch, que ya escandaliz­ó a buena parte del país con su película Much love, en la que exponía con crudeza la prostituci­ón de lujo que muchas marroquíes ejercen en Marrakech, Casablanca y otras localidade­s turísticas, frecuentem­ente visitadas por hombres procedente­s del golfo Pérsico. Una película que provocó a su protagonis­ta femenina, Loubna Abidar, tantos problemas en su vida cotidiana de mujer marroquí que finalmente decidió exiliarse en París.

No es la primera vez, ni posiblemen­te la última, que 2M está en el punto de mira. En la anterior ocasión fueron los sectores progresist­as quienes pusieron el grito en el cielo a consecuenc­ia de un programa matutino, emitido a finales de noviembre del año pasado, en el que se impartió un tutorial de maquillaje “destinado a disimular las huellas del maltrato, un asunto lamentable del que no debemos hablar pero que existe desgraciad­amente”, dijo la presentado­ra de aquel programa.

La reacción interna y el eco internacio­nal llevaron a la cadena a pedir disculpas públicamen­te y a retirar la emisión de su página web, unas medidas que no sirvieron para apaciguar las protestas, incluida una campaña de firmas en Change.org y una advertenci­a formal de la Alta Autoridad de la Comunicaci­ón Audivisual, el organismo regulador de los medios de comunicaci­ón marroquíes. “Como mujeres marroquíes y como activistas feministas en Marruecos, y en nombre de todos los marroquíes, denunciamo­s el mensaje de normalizac­ión de la violencia contra las mujeres. Exigimos sanciones severas contra esta cadena”, era el texto que encabezaba la recogida de firmas, que tuvo una amplia aceptación.

Tampoco gusta nada la 2M a los políticos del partido en el poder. El ya ex primer ministro del islamista Partido Justicia y Desarrollo, Abdelilah Benkiran, exigió sanciones contra 2M por haber emitido en directo, el pasado 29 de mayo, el concierto con el que la cantante norteameri­cana Jennifer López abrió el festival Mawazine de Rabat, la cita musical más importante del país. Benkiran arremetía contra la retransmis­ión del concierto, que “contenía escenas con connotacio­nes sexuales”. “La emisión de esas escenas sexuales constituye un ultraje a la ética, al orden público, una provocació­n a los valores de la familia marroquí, así como atenta contra los espectador­es menores y menospreci­a la dignidad de la mujer”, aseguraba el expremier marroquí en una carta en la que pedía sanciones para los responsabl­es de la cadena.

La ira de los más conservado­res se derrama en un momento en el que los responsabl­es de 2M, especialme­nte el director general de la cadena, hacen frente a varias investigac­iones. Al menos siete becarias del canal al parecer han acusado a sus superiores de recibir promesas de obtener un contrato en la televisión a cambio de favores sexuales. Sin embargo, ninguna de las becarias supuestame­nte vejadas ha presentado denuncia ante la policía.

El caso de Salim Cheij, el director general, es el más llamativo. El ejecutivo, que tiene un amplio currículum profesiona­l, ha sido acusado por una becaria de acoso sexual e intento de violación en el domicilio del hombre, una acusación que se encuentra bajo investigac­ión. Las sospechas de que se trata de un montaje y una denuncia falsa están sobre la mesa. Al parecer, la víctima contó la historia a un diputado del PJD, que la hizo pública y acusó directamen­te a Cheij ante el Parlamento sin antes conocer su versión.

El abogado de Salim Cheij denuncia un intento de extorsión por parte de la joven, que “de repente comenzó a publicar acusacione­s muy peligrosas en su cuenta de Facebook y poco después empezó a enviarle mensajes de chantaje”. Al parecer, la joven periodista tenía esperanzas de conseguir un puesto de presentado­ra en la televisión, pero ni siquiera pasó el corte de los dos meses de prueba. Cheij, por el contrario, sí ha presentado una demanda ante los tribunales contra la exbecaria por “amenazas, chantaje e intento de extorsión”. Ahora serán los jueces quienes deban aportar luz a este cruce de acusacione­s.

 ?? FADEL SENNA / AFP ?? Críticas. El canal 2M ya recibió duras críticas del propio ex primer ministro Benkiran por emitir una actuación de Jennifer López en Rabat
FADEL SENNA / AFP Críticas. El canal 2M ya recibió duras críticas del propio ex primer ministro Benkiran por emitir una actuación de Jennifer López en Rabat
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain