Un negocio ruinoso
Serna propone “alianzas estratégicas” en Renfe Mercancías con otros operadores
Fomento defiende la reprivatización de aquellas autopistas ruinosas que deba rescatar con dinero público, una propuesta que para el ministerio supondría un ahorro, pero que es rechazada por Facua.
El Ministerio de Fomento quiere volver a sacar a concurso las autopistas radiales quebradas porque considera que con la recuperación del tráfico y sin “la mochila” de la deuda de unos 3.200 millones de euros pueden ser viables. Lo dijo ayer el titular de la cartera, Íñigo de la Serna, quien aseguró que Seittsa, sociedad dependiente de su ministerio, se está ya preparando para que cuando tenga que quedarse con alguna autopista pueda abordar su posterior “relicitación”.
Al ceder de nuevo la concesión de estas vías de peaje, Fomento podría obtener recursos para afrontar la responsabilidad patrimonial de la Administración (RPA) que supondría su rescate previo. De esta forma, no impactaría en las arcas públicas. La RPA es el importe que el Estado debe abonar a los actuales concesionarios de las autopistas por la inversión que realizaron en su construcción, una factura “inferior a los 3.000 millones de euros”, según el ministro, pero que el sector calcula en unos 5.000 millones.
Adicionalmente, el Ministerio de Fomento informó ayer por la tarde de que con la reprivatización el Estado se ahorraría los costes de 65 millones anuales en concepto de mantenimiento, conservación y gasto de personal de las vías. En febrero pasado el tráfico de esas autopistas había crecido en un 10,5% interanual.
Durante su intervención en el foro Ágora de El Economista , De la Serna confirmó que ha concluido sin acuerdo la negociación que emprendió al llegar al ministerio con los acreedores de las vías, en su mayor parte fondos buitre, sobre el plan de rescate planteado en el 2014. “Las diferencias eran importantes”, indicó sobre dicho plan, que implicaba que el Estado asumiera las ocho autopistas tras aplicar una quita del 50% a su deuda y titulizar en un bono el resto del pasivo.
El ministro consideró una “buena noticia” el hecho de que los tribunales estén suspendiendo o dejando en suspenso los procesos de liquidación a los que ya ha llegado alguna de las ocho autopistas quebradas. “Nos da más margen para maniobrar y prepararnos para si hay que quedárselas”, indicó. La Audiencia Provincial de Madrid resolvió recientemente suspender la liquidación de la autopista de circunvalación de Alicante, que ha vuelto así a la fase del concurso en el que la concesionaria puede negociar la deuda con los acreedores para superar la insolvencia, y se espera que lo mismo ocurra con la de las radiales R-3 y R-5. Están en una situación semejante las otras dos radiales (R-4 y R-2), la Madrid-Toledo, la Ocaña-La Roda, la Cartagena-Vera y la M-12, la que une Madrid con el aeropuerto de Barajas.
Horas después del anuncio realizado por De la Serna, la organización de consumidores Facua emitió un comunicado en el que se oponía a la reprivatización de las autopistas quebradas que acaben siendo rescatadas por el Estado.
De la Serna se refirió ayer también al futuro de Renfe Mercancías. El ministro dijo que buscará establecer “alianzas estratégicas” con operadores privados para reflotar su negocio una vez acometa el plan de saneamiento que ha puesto en marcha para evitar la quiebra y garantizar su viabilidad. “Necesitamos contar con un operador ferroviario público de referencia para garantizar la estrategia logística del país, para convertir a España en un hub logístico del sur de Europa”, indicó el ministro.
Facua se opone a la reprivatización de las vías radiales que sean rescatadas por el Estado