El arte de defender
Si alguna sensación futbolística transmitió la Juve, fue la de defender de maravilla. Curiosamente quizás hubo algunos aficionados que vieron en muchos momentos que la Juve era asequible, ya que el Barcelona remataba y remataba. Si queremos definir qué es defender bien, entenderíamos que es generar aquel esquema de juego que te protege de que el rival realice disparos. Esa sería una definición utópica si además tienes enfrente a un equipo ofensivo como el Barcelona con la obligación añadida de marcar sí o sí. Entonces podríamos decir que frente al Barcelona el mejor sistema defensivo es aquel que hace que por mucho que rematen, la mayoría de los disparos no consigan dirigirse entre los tres palos. Y eso es lo que sucedió ayer. Los de Luis Enrique chutaron 21 veces a puerta y en cambio sólo hicieron intervenir a Buffon en dos ocasiones. Es decir sólo el 9% de los disparos azulgrana fueron dirigidos al marco. Y esto sucede porque los componentes del sistema defensivo se ordenan de maravilla estableciendo equidistancias que les permiten presionar a cualquier jugador que se disponga a disparar. Y lo complementan con un gran dinamismo y con continuidad en la acción defensiva, todo un arte. Esa cultura la tienen muy pocos porque eso ni es glamuroso. Pero esa cultura la tienen jugadores como Chiellini, capaz de celebrar con más alegría el abortar una jugada de ataque rival que no marcar un gol.
Soy un gran admirador de este jugador. En más de un artículo he alabado todo lo que él es capaz de dar a un equipo. Ayer fue un nuevo ejemplo de su valor. Jamás he visto a alguien competir al nivel que lo hace Dani. Con la ventaja de tres goles en el marcador y ya pasados los 90 minutos, lo vimos presionar en campo contrario a tres jugadores del Barcelona. Cualquier otro hubiera estado en una posición retrasada, esperando a que el árbitro finalizara el encuentro. Él no, compitió y compitió. Estoy seguro de que ha sido una de las claves para que el Barcelona estuviera alejado de sus mejores prestaciones.
El Messi humano. Es de las pocas veces que he visto humano a Messi. Y no lo digo por su nivel de juego. Lo digo porque hubo unos minutos que perdió la concentración y coleccionó algunas jugadas
El aficionado azulgrana fue inteligente al entender que era mejor recordar el maravilloso pasado
desacertadas, como si una nube de vulgaridad hubiera poseído su cuerpo. Y hago esta afirmación no como una crítica, sino como la mayor de las alabanzas. Desde el respeto que genera la admiración que siento por él. Futbolísticamente, la remontada frente al Juventus era imposible y sólo la presencia de ese fenómeno llamado Lionel me hacía pensar que existía una pequeña posibilidad. La respuesta del Camp Nou a esos pocos minutos de naufragio del argentino fue corear su nombre. El aficionado azulgrana fue inteligente al entender que era mejor valorar a sus jugadores por el maravilloso recorrido pasado que por lo que no pudo ser, una buena filosofía de vida.