Junqueras reivindica la independencia frente al acuerdo del cupo vasco
Al vicepresident Oriol Junqueras le pilló en Nueva York el pacto sobre el cupo entre los gobiernos central y vasco. Aunque se mostró reticente a entrar en materia, utilizó la cuestión para reivindicar que el único buen acuerdo para Catalunya es la independencia y “disponer de las mejores herramientas posibles que son las herramientas de un Estado”, remarcó.
Una de las misiones de su viaje consiste en explorar nuevas vías de financiación, abrirse a los mercados internacionales con la emisión de deuda soberana. En este terreno también atribuyó a esa “asociación” con el Gobierno central el que las agencias de rating aporten una mala calificación a esos bonos, hoy considerados basura. (B+ según Standard and Poor’s.)
Su discurso se fundamenta en que la economía catalana va mucho más al alza que las de su entorno, “crece cuatro veces más deprisa que el déficit que tuvimos en el 2016, un déficit del 0,9% y un crecimiento del 3,5%”, señaló. “La economía catalana está en disposición de asumir las responsabilidades que tiene en este momento y que tendrá en el futuro, y es bueno que el mundo lo sepa”.
Según aclaró, esa mala nota no se refiere al estado de la economía catalana. “Las agencias de rating califican la fluidez de las relaciones entre quién recauda el 95% del esfuerzo fiscal, que es el Gobierno español, y quien tiene la responsabilidad de garantizar los servicios sociales fundamentales, que en este caso es el Govern”.
De ahí dedujo que las agencias examinan esa fluidez y no que “evalúen de forma negativa la salud de la economía catalana, porque cuando evalúan la salud de la economía catalana, y cuando evalúan el trabajo que estamos haciendo, la valoración es necesariamente, inevitablemente, muy positiva”.
Para el vicepresidente, a lo largo del último año, las agencias han empezado a especificar la observación “relevante” de que examinan “esa fluidez” y no que pongan nota “ni a la economía catalana ni la eficacia de la gestión que hacemos”.
Junqueras, que nunca había pisado la Gran Manzana, se aloja en un hotel del bajo Manhattan, en el cogollo de Wall Street. Y es que la cuestión económico-financiera parece ser el meollo de este trayecto, que arrancó en Miami, aunque a los periodistas no se les ha desvelado ningún tipo de contacto con operadores del sector, salvo aquellos previstos con la comunidad catalana residente en EE.UU.
“Es irrelevante si me ha sorprendido”, contestó ante la insistencia por sacarle una consideración sobre ese acuerdo entre Madrid y Vitoria que supone una rebaja en más de 500 millones anuales.
“Lo relevante es que siempre nos han enseñado que el Gobierno español no cumple los acuerdos a los que llegan con las instituciones catalanas, ni en materia de financiación, ni en materia del Estatut, ni en nada”, subrayó el líder de ERC.
El vicepresidente culpa, en su visita a Nueva York, del bajo rating catalán al Gobierno central