Golpe sobre la mesa de los vecinos de las Glòries

La teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, pidió ayer disculpas a los vecinos de las Glòries, les dijo que entendía su disgusto, pero que el Ayuntamiento no tenía más remedio que rescindir el contrato de estas obras y volver a empezar... A pesar de su tono conciliador, los vecinos que llenaron el auditorio del campus del Poblenou criticaron con dureza la labor municipal. “O sea –intervino una vecina–, las obras pueden comenzar a principios del 2018, ¿no? Y estar listas en el 2020, ¿verdad? ¿Pero usted incluye también las obras del segundo túnel?”. En ese momento, al menos desde el fondo del auditorio, no hubo modo de escuchar la respuesta de Sanz. “¿No? Pues no lo entiendo...”. “Sabemos que ustedes recibieron una herencia envenenada –comenzó otro vecino–, pero ustedes no supieron controlar las obras, no las controlaron, ¡y eso era responsabilidad suya!”. A partir de este momento las críticas se endurecieron de modo sensible. “Parece que tenían muchas ganas de que todo saliera mal”. “Esto será peor que Lesseps”. “Estamos desprotegidos, abandonados, ¡a la hora de la verdad el Ayuntamiento no cuenta con los vecinos!”. Y mientras tanto, el edil de Vivienda y de Sant Martí, Josep Maria Montaner, cruzaba los dedos, confiaba en que la maldición de las Glòries no se extienda. Pocas horas antes anunció que a finales del 2018 comenzarán las obras de 280 pisos, la mayoría de alquiler asequible, muy cerca de las obras detenidas. “No tendrán ninguna influencia. El solar está preparado”, dijo.