Manel: “Cada noche visualizo cómo será mi actuación”
El representante español de Eurovisión 2017 parte hoy hacia Kíev
Veinticuatro horas antes de partir hacia Kíev, Manel Navarro (Sabadell, 1996), que representará a España en el festival de Eurovisión 2017 con la canción Do it for your
lover, aseguró afrontar con ilusión y muchas ganas su participación en el concurso. En un encuentro con los medios bajo la llovizna en la playa de Llevant en Barcelona, el joven intérprete dio por iniciada la cuenta atrás para su participación en el festival y confesó que hace varias noches que le cuesta conciliar el sueño: “Intentando visualizar cómo van a ir mis tres minutos de actuación y repasando mentalmente todo lo que hay que hacer”.
Un poco ansioso por que llegue ya la cita ucraniana, Manel estrenó ayer la guitarra con la que actuará en Kíev ofreciendo una pequeña actuación con la versión acústica de Do it for your lover y dos temas más, uno de Beyoncé y otro de Ed Sheeran, al que definió como su ídolo: “Gracias a él empecé a cantar y a tocar”.
A partir de hoy, cuando aterrice en Kíev, le esperan todavía diez días de ensayos, ruedas de prensa y otros actos. El cantante de Sabadell aseguró estar tranquilo porque “se han hecho muy bien los deberes” y porque gracias a la promoción que ha realizado por Europa ha cogido tablas al subir tantas veces a un escenario ante un gran número de espectadores. Y además ha visto hacerse realidad el sueño de su vida, que era “tocar fuera de España”. También se mostró muy feliz y alucinado “porque mucha gente conocía la letra” de su canción”. Sobre la puesta en escena, explicó que “tiene mucho de buen rollo, amistad, surf y playa”, y confirmó los rumores que se han filtrado sobre la escenografía: “Aparezco sobre una tabla de surf, pero es todo virtual, de lo contrario, sería demasiado complicado, y ya lo es bastante”.
El mejor consejo que asegura haber recibido es que salga al escenario y disfrute porque “esos tres minutos no se van a repetir nunca”. El cantante explica que le gustaría actuar al principio de la segunda ronda, a partir de la posición 14 de entre los 26 participantes. Y respecto a en qué lugar cree que quedará, dice que estaría más que contento si se sitúa “en el top ten, aunque quedar entre el 11 y el 15 tampoco lo consideraría un fracaso”.
El joven cantante es consciente de que con Eurovisión todo es relativo: “Nunca se sabe. Igual haces una actuación redonda pero no gustas al público y quedas mal o haces una actuación menos decente y acabas mejor situado. No hay pautas para el éxito, depende de muchos factores”. Para Manel, el representante de Italia, Francesco Gabbani, con la canción Occidentali’s Karma, es el gran favorito. “He escuchado todas las canciones e Italia tiene muchas posibilidades de ganar, sólo hay que mirar las apuestas. Aunque muchas veces se dan sorpresas en Eurovisión; a ver si este año es uno de esos”, declara.
Pese a la polémica surgida cuando Manel fue elegido representante español para Eurovisión, asegura sentirse arropado “desde el principio” por los fans del festival. “Aunque sí es verdad que tras el concierto de Madrid aún me siento más arropado”, añade. La polémica con Mirela parece cerrada.
¿Y qué pasará con su vida cuando todo esto acabe? “No dejaremos de trabajar. Hemos sacado ya un disco y tenemos previstos dos conciertos, uno en Barcelona y otro en Madrid”. Si acaba ganando, afirma que seguramente lo celebraría con una gran fiesta. “Una fiesta que a lo mejor no me deja volver a casa al día siguiente y tengo que quedarme en Kíev un día más”, bromea. ¿Y lo que ha dicho en alguna entrevista de que se rapará la cabeza? “Bueno, ya lo veremos”, sonríe.