Precios manipulados
La Audiencia Nacional sospecha que la eléctrica Iberdrola podría haber manipulado los precios de la electricidad durante el final del 2013 para obtener más beneficios.
Redacción y agencias
La Guardia Civil registró el miércoles las sedes de Iberdrola en Madrid y Bilbao por orden del juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno tras admitir una denuncia del fiscal anticorrupción Antonio Romeral por presunta manipulación fraudulenta del mercado mayorista de electricidad que supuso un alza artificial del precio entre el 30 de noviembre y el 23 de diciembre del 2013. Estas prácticas pudieron hacerse en las ofertas de las centrales hidráulicas de Duero, Sil y Tajo.
Fuentes de la compañía negaron los hechos que motivaron la denuncia y aseguraron que el grueso de la información solicitada ahora ya está en manos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que analizó los hechos en su momento e impuso una sanción de 25 millones en noviembre del 2015 recurrida ante los tribunales y pendiente de resolución.
En su denuncia, según informó ayer El País, Romeral considera que Iberdrola Generación España obtuvo “un lucro ilícito de 20 millones”. El delito que se investiga aparece tipificado en el artículo 281 del Código Penal y se refiere a actuaciones contra el mercado y los consumidores, que prevé penas de prisión de uno a cinco años y multas de 12 a 24 meses.
La compañía aseguró que no interfirió en el proceso de formación de precios, “no medió en ningún momento engaño o fraude”. Iberdrola, explicaron las fuentes, “actuó siempre como un gestor prudente y razonable de las centrales investigadas”, lo que, según la empresa, “ha probado mediante la presentación de informes de expertos cualificados independientes”. Y añadieron que la compañía “carecía de capacidad de incrementar el precio del mercado, al no tener posición de dominio”.